La base de Infantería de Marina “Baterías”, ubicada en las afueras de Punta Alta, en el sur bonaerense, fue señalizada como “Sitio de la Memoria del Terrorismo de Estado”.
La actividad se realizó en el ingreso a la séptima batería histórica, donde funcionó un centro clandestino de detención, tortura y exterminio en el que fueron vistas por última vez personas secuestradas por oficiales de la base naval de Puerto Belgrano y sus subordinados de Prefectura.
La señalización fue ordenada a fines de 2015, a pedido de los fiscales Miguel Palazzani y José Nebbia y de querellantes locales, por el Tribunal Oral Federal de Bahía Blanca que condenó por primera vez a una veintena de represores de la Armada por delitos de lesa humanidad en esa jurisdicción. En esa sentencia se ordenó además realizar trabajos de prospección para recolectar nuevas pruebas, tarea aún pendiente por la demora en la asignación de recursos por parte del Consejo de la Magistratura de la Nación.
Puerto Belgrano es el mayor asentamiento naval del país y fue en el cine de esa base donde los oficiales navales supieron por primera vez sobre los “vuelos de la muerte” aprobados por la jerarquía católica que se aplicarían sistemáticamente después del golpe de Estado. Para los secuestrados de la zona usaron primero el “Puesto 1”, cerca de la entrada principal, luego un barco desmantelado amarrado a un muelle, el buque “ARA 9 de Julio”, y finalmente una de las baterías históricas sobre la costa, fortalezas de piedra con paredes de un metro de ancho construidas a fines del siglo XIX para custodiar el puerto militar.
Fuente: Página 12