La Escuela Especial Stella Maris afronta los desafíos educativos con alegría y esperanza

Ayer, en el «Día de la Educación Especial», en un año que plantea desafíos adicionales, han realizado un repaso por la historia y el presente del instituto educativo.

En 1949 se encomendó al profesor Mario Vitalone la organización del Departamento de Niños Excepcionales –más tarde transformada en Dirección de Enseñanza Diferenciada, de la que surgió la Dirección de Educación Especial bonaerense–, hecho que se concretó el 9 de agosto.

71 años más tarde, el 2020 planteó desafíos a toda la educación. Docentes y alumnos de la Escuela Especial Stella Maris, ubicada en la Base Naval Puerto Belgrano, demostraron estar a la altura, conservando el espíritu alegre y esperanzador que los caracteriza.

Los antecedentes de la Escuela Especial en la Base Naval Puerto Belgrano se remontan al año 2000, cuando a partir de la inquietud de integrantes de la Comisión de la Obra taller Stella Maris surgió como propuesta la creación del Centro Educativo Terapéutico, con participación de la entonces obra social DIBA. Se fundaba en la necesidad de atención, contención y educación ante el arribo de familias a Puerto Belgrano con niños con necesidades derivadas de la discapacidad.

Encontrar un espacio que pudiera contener a los niños y sus familias en un marco de confianza, atención específica educativa y de acompañamiento respecto a la educación de sus hijos, fue lo que motivó la creación como Centro Terapéutico Educativo y así, con esa denominación, inició.

Un año más tarde comenzó la gestión para la incorporación a la DIEGEP. Con fecha 11 de agosto de 2003, bajo el número de resolución 3257, se autorizó el funcionamiento de la Escuela Especial Stella Maris con atención de Discapacidad Intelectual y Motora en los niveles inicial y primaria bajo el número 6133.

En la actualidad, la Escuela cuenta con 67 alumnos distribuidos en las modalidades Sede e Inclusión, en los niveles inicial, primaria y secundaria. Se rige por las leyes y normas de Educación Nacional y Provincial emanadas de la DIEGEP. Posee escolaridad simple y jornada doble para los alumnos que cumplimentan los talleres de formación laboral. Por el crecimiento de la matrícula, a comienzos de este año la Base Naval le otorgó otra vivienda –ubicada frente a la sede original– para que los alumnos, docentes y personal puedan compartir el momento del almuerzo y diversos proyectos educativos. Dentro de la currícula, los niños tienen educación física, natación y equinoterapia en el Club Hípico de la Base Naval Puerto Belgrano.

En lo que respecta al presente año y los desafíos que se presentaron derivados del aislamiento social preventivo y obligatorio a causa de la pandemia de COVID-19, la directora de la Escuela, profesora Fernanda Tirrelli, repasó: “El 16 de marzo comenzó a gestarse una planificación bien diferente, dado que había que enmarcarse en la virtualidad. En principio parecía muy difícil, pero todo el equipo docente no dudó en la gran oportunidad que se presentaría para una educación distinta donde, sin dudas, nuestros héroes, nuestros alumnos, nos ayudarían a transitar el camino junto a sus familias”.

Los inicios plantearon la necesidad de reorganizar los grupos a través de Whatsapp, aprender a usar el Zoom y Meet para poder seguir comunicados con los estudiantes y sus familias. “La mirada, ver a su maestra, era esencial. No se trataba de trasladar la escuela al hogar, sino de preparar propuestas donde se fusionaran la alegría del encuentro y un espacio para los aprendizajes”, detalló la profesora Tirrelli.

“El equipo docente, de calidad humana y formación de excelencia, prontamente comenzó la preparación de las actividades pedagógicas, reuniéndose virtualmente primero con las familias, brindándoles orientación para que pudieran colaborar con sus hijos, y semanalmente se encuentran vía Zoom o Meet con los alumnos.”

Durante los encuentros virtuales se dan múltiples actividades: los docentes cuentan cuentos, juegan al bingo, preparan productos provenientes del taller, cocinan, cuentan historias, muestran sus producciones de la semana. En el área de Educación Física, con las medidas extremas de cuidado, se les repartieron a los alumnos elementos para que pudieran trabajar en sus casas y recibieron videos con coreografías y desafíos divertidos.

La Escuela cuenta con un equipo técnico que trabaja para que a través de llamadas telefónicas o videollamadas por Whatsapp se pueda mantener la comunicación con las familias a fin de brindarles ese espacio de acompañamiento. El equipo directivo, en tanto, coordina, proyecta y acompaña todas las actividades que se dan en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio.

“Es de destacar, valorar y agradecer el esfuerzo que hacen las familias por el acompañamiento, y el de los estudiantes por recibir y esperar a sus seños con tanta alegría y buena predisposición. Todo el personal del servicio, el equipo docente, auxiliar, equipo técnico, profesores especiales, por desplegar las mejores estrategias para llegar a los hogares de nuestros estudiantes con enseñanza y aprendizaje”, concluyó la Directora Fernanda Tirrelli.

Gaceta Marinera