Jonas Bracco, reconocido intensivista de Bahía Blanca, aseguró que las terapias intensivas de los hospitales están trabajando por encima de sus posibilidades. «Tener que definir quién se interna y quién no es terrible», dijo.
«Terapias públicas sin capacidad de ingreso de pacientes, hospitales privados sin posibilidad de responder porque están también al 100% de su capacidad. Hace tres días que intento como intensivista conseguir una cama para el papá de un vecino, que además es suegro de un médico y no hay camas. Esa persona fue denegada para ingresar a una UTI porque hay personas más jóvenes para ventilar. Eso se llama ‘triage’ y nos está pasando. En el espacio público tenemos gente de distintas edades que pueden requerir ventilarse inminentemente. Hoy, hay un joven de 22 años y ¿saben que?, No hay camas…»
La publicación que realizó Jonas Bracco, el reconocido médico intensivista de la ciudad en su cuenta personal de Facebook, habla a las claras de la delicada situación sanitaria por la que atraviesa nuestra ciudad en medio de la segunda ola de coronavirus.
Esta tarde, y tras haberse anunciado otra jornada con alta tasa de contagios tanto en Bahía Blanca como a nivel país, el propio Bracco no solamente ratificó sus dichos, sino que ahondó aún más en sus conceptos.
«El Penna, el Municipal y todos los privados están trabajando prácticamente con su dotación de camas completas. Incluso, el Municipal está trabajando al 120% de sus camas de terapia intensiva. Para que se entienda, si normalmente tenía 13 camas, ahora tuvo que colocar 17. Además, en el área no Covid, se encuentran pacientes que ahora tienen un PCR negativo, pero que todavía presentan alguna secuela generada por la enfermedad», aclaró durante el programa Nunca es Tarde, de LA BRÚJULA 24.
El especialista aseguró que hoy en Bahía se está haciendo «triage», es decir que los especialistas son quienes deciden quién, de acuerdo a su edad y a su estado de salud, accede a las pocas camas que hay disponibles en el sistema hospitalario.
«Hoy una persona con la mejor prepaga y con la mínima cobertura pelean por el mismo lugar. Es terrible tener que elegir», resaltó.
Pero no solamente faltan camas en los diferentes centros asistenciales. También se necesita personal para atender a los enfermos.
«Formar un médico intensivista demanda 16 años de estudio aproximadamente. No los podés sacar rápido ni clonarlos. El punto es que antes de esta crisis, nadie se preocupó porque salgan nuevos profesionales. Ser intensivista es una especialidad muy mal paga. Uno debería estar loco para elegirla como profesión. Somos pocos y trabajamos en varias ocupaciones al mismo tiempo», completó.
Les pido por lo que más quieran, cuídense, usen tapabocas, lávense las manos y mantengan distanciamiento.
Fuente: La Brújula 24