El Dr. Guillermo Durán afirmó que en aquellas zonas donde se suspendió el dictado de clases presenciales comenzó a descender la curva de casos de coronavirus.
Un grupo de 14 investigadores de la UBA y el CONICET, liderados por los doctores Guillermo Durán y Rodrigo Castro, realizó un estudio para determinar cómo impacta la presencialidad en las instituciones educativas en la curva de contagios de coronavirus.
“Preocupados por el fallo de la Corte Suprema que habla de falta de evidencia en la decisión del presidente de suspender las clases presenciales, decidimos hacer este informe”, explicó Durán en diálogo con Radio Altos.
En ese sentido, agregó que decidieron estudiar si se veía, desde los datos, con la suspensión de la presencialidad algún efecto positivo en la curva de contagios, comparando el Conurbano donde se retomó en su totalidad la virtualidad y la Ciudad de Buenos Aires, cuyo gobierno decidió no acatar el decreto de necesidad y urgencia de Alberto Fernández.
“El primer punto es que detectamos una reducción de la suba en la curva de contagios”, aseveró.
Además, al analizar lo que ha sucedido en otros países y qué medidas han adoptado respecto a las clases, mencionó que Chile y Colombia han fijado como umbral para suspender la presencialidad el límite de 200 casos semanales cada 100 mil habitantes. “Cuando se firmó el DNU, el Conurbano rozaba los 500 casos y la Ciudad de Buenos Aires estaba arriba de los 600, es decir, tres veces más que los umbrales de Chile y Colombia”, precisó.
Y sumó la situación de países de Europa, algunos con límites de 165 casos cada 100 mil habitantes como planteó la canciller alemana Ángela Merkel. “La evidencia en otros lugares es clara respecto a la correctitud de suspender la presencialidad”, manifestó.
Y como tercer punto de análisis, indicó que estudiaron investigaciones de científicos a nivel internacional que definieron cuál es la influencia de las clases presenciales en el aumento de la curva de casos positivos de COVID- 19, que señaló, se da no tanto con contagios en aulas sino con el movimiento que implican las actividades en los establecimientos educativos.
“Hay una relación directa entre presencialidad y el aumentos de casos, siempre con la salvedad de que este tipo de cuestiones son multicausales. La presencialidad tiene un efecto en la curva de contagios y surge de los análisis que hemos hecho”, insistió.
Durán volvió a considerar que la decisión del presidente Fernández de suspender la presencialidad en zonas con alerta epidemiológica es correcta y, hasta opinó, tardía. “Comparado con el resto del mundo demuestra que es necesario tomar ese tipo de medidas”, remarcó.
Para el director del Instituto de Cálculo UBA- CONICET, un proyecto de ley que defina qué medidas tomar de acuerdo a datos epidemiológicos es una buena idea que permitiría “independizar de los debates políticos” a las decisiones que se adopten para hacer frente a la pandemia.
“Las medidas que se tomaron de mayores restricciones ayudaron a una disminución general de la curva de contagios, pero seguimos con cifras altas. Hay que intensificar la campaña de vacunación y mientras tanto seguir cuidándonos”, concluyó.
Fuente: Frente a Cano