El delito de trata de personas se incorporó al ordenamiento jurídico argentino luego de la sanción de la ley 26.364 de Prevención y Sanción de la Trata de Personas y Asistencia a sus Víctimas en 2008, que además de la explotación sexual también prevé la represión de aquella conducta realizada con fines de explotación laboral. Esa norma fue reformada en 2012 mediante la ley 26.842.
Nueve sentencias condenatorias por trata de personas con fines de explotación sexual fueron dictadas en lo que va del año, con lo cual suman 326 desde 2009, de acuerdo con un relevamiento de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex).
El organismo difundió el informe este viernes, en el Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Mujeres, Niños y Niñas.
El delito de trata de personas se incorporó al ordenamiento jurídico argentino luego de la sanción de la ley 26.364 de Prevención y Sanción de la Trata de Personas y Asistencia a sus Víctimas en 2008, que además de la explotación sexual también prevé la represión de aquella conducta realizada con fines de explotación laboral. Esa norma fue reformada en 2012 mediante la ley 26.842.
En 2009 se registraron las primeras tres condenas por trata de personas con fines de explotación sexual.
Al año siguiente, fueron 17; en 2011, 20; en 2012, 16; en 2013, 18; en 2014, 24; en 2015, 34; en 2016, 31; en 2017 se registró el pico de sentencias condenatorias anuales, con 44; en 2018, 39; en 2019; 28; en 2020, 16; y en 2021, 27, detalló el Ministerio Público Fiscal en su web fiscales.gob.ar.
De acuerdo con el informe de la Protex, la jurisdicción federal con más sentencias condenatorias desde 2009 a la fecha es Córdoba, con 36.
Le siguen Mar del Plata, con 34; Comodoro Rivadavia, 32; Mendoza, 31; Rosario y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con 23 cada una; Paraná, 22; Salta, 17; San Martín y Tucumán, con 16; Resistencia, Bahía Blanca y General Roca, con 15; La Plata, 11; y Posadas y Corrientes, con 10.
Las estadísticas se actualizan periódicamente y pueden verse en el micrositio de la Protex.
Fuente: InfoGEI