El Tribunal Oral Federal de Neuquén dio este martes su veredicto en el juicio contra los funcionarios judiciales que actuaron en la provincia durante la última dictadura cívico-militar. Los imputados son el exjuez Pedro Duarte y el exfiscal federal Víctor Ortiz, quienes hoy reiteraron su pedido de absolución y hablaron de una «demonización» por parte de la fiscalía y las querellas. En un histórico fallo, los jueces los condenaron a 11 años de prisión efectiva.
El llamado juicio Escuelita VIII es el único que se desarrolló contra funcionarios judiciales por su responsabilidad en los secuestros, torturas y desapariciones forzadas durante la dictadura en la región.
El fallo debía definir sobre dos hipótesis contrapuestas: los funcionarios judiciales que asumieron en 1976 no pudieron hacer nada para contrarrestar a la dictadura en el Alto Valle, o bien fueron nombrados en el único juzgado federal de Neuquén por el Comando, para secuestrar y desaparecer a los contrarios al régimen militar sin palos en la rueda.
Ambos imputados hicieron uso de sus últimas palabras y ratificaron su inocencia, pidieron al tribunal su absolución y aseguraron que hubo una campaña de «demonización» por parte de la fiscalía y las querellas.
El Tribunal Oral Federal finalmente determinó la culpabilidad de ambos. A Pedro Duarte lo condenó a 11 años de prisión efectiva como partícipe necesario por los secuestros (privación ilegal de la libertad), como autor por la omisión de la persecución penal y como autor de prevaricato. Por todos los casos, 15 de ellos de desaparecidos.
Y a Víctor Ortiz también a 11 años de prisión efectiva como autor del delito de omisión de promover la persecución penal y por su responsabilidad secundaria en los secuestros, también por todos los casos.
La audiencia comenzó a las 9 puntual y está colmada de familiares de detenidos y desaparecidos de la región por la última dictadura, acompañados de organizaciones de Derechos Humanos. Este juicio es el octavo que se realiza en Neuquén y comenzó en octubre del 2023.
Tal vez sea el último ya que, si bien hay casos instruidos y elevados a juicio, no quedan responsables en condiciones de ser llevados al proceso.
Los imputados están acusados de prevaricato, en el caso de Duarte (actuación ilícita de un juez), y de omisión de persecución penal (no investigar), de privación ilegal de la libertad en 23 casos como partícipes secundarios de los secuestros, torturas y desapariciones forzadas.
El tribunal que participó en este juicio para determinar la responsabilidad de Pedro Laurentino Duarte y Víctor Ortiz está presidido por una mujer por primera vez en los juicios de Neuquén: María Paula Marisi, quien ya actuó en juicios de lesa humanidad en Mendoza y en San Luis.
Los otros integrantes del tribunal son Alejandro Silva, de General Roca, y Sebastián Foglia, de Bahía Blanca.
Integran la fiscalía Miguel Palazzani, Gabriela Shumacher, David Maestre y Juan José Cendagorta. Natalia Hormazábal y Mariana Derni son la querella de Inés y Oscar Ragni y Marcelo Medrano y Bruno Vadalá la de la APDH, mientras que Ciro Annichiarico representó la querella de Nación.
El equipo de la defensa pública de Duarte fue integrado por Eduardo Peralta, María Laura Irastorza y la de Ortiz, por Celia Delgado, Gabriela Labat y Alejandra Vidales.
Fuente: Diario Río Negro