La información sobre el preservativo es abundante y las campañas se multiplican en redes y en televisión, pero el uso real sigue siendo bajo y las infecciones de transmisión sexual alcanzan niveles nunca vistos. Según el Boletín Epidemiológico Nacional N.º 782, los contagios de sífilis en adolescentes aumentaron más de un 20% y, en las primeras 44 semanas del año, se registró un crecimiento marcado en provincias como Córdoba y San Luis.
De acuerdo con los datos del Ministerio de Salud, la sífilis llegó en 2025 a un máximo histórico. En menos de un año, Argentina igualó el total anual registrado en 2024. El mayor impacto se observa en adolescentes y adultos jóvenes: el 76% de los casos corresponde a personas de entre 15 y 30 años, con tasas especialmente altas entre mujeres de 20 a 29 años. En 2023 se superaron los 30.000 casos y en 2024 se alcanzó el valor más elevado hasta entonces, con 36.917 notificaciones, lo que representó un incremento del 38,5% interanual.
Este año la tendencia volvió a escalar. El Sistema Nacional de Vigilancia informó que, en las primeras 44 semanas de 2025, se notificaron 36.702 casos en la población general, un aumento del 20,5% respecto del mismo período de 2024. La expansión abarca todo el país, con la región Sur al frente del crecimiento (32% más), seguida por Cuyo (24%). Córdoba encabeza las tasas nacionales con 220 casos por cada 100.000 habitantes, seguida por San Luis (190), Jujuy (181), Chaco (159) y Tierra del Fuego (145). En la Ciudad de Buenos Aires se notificaron 43 casos cada 100.000 habitantes, el doble que en 2023.
El fenómeno no es solo local. A nivel global, y particularmente en América, los casos aumentan de manera sostenida desde hace más de una década. La Organización Panamericana de la Salud registró un crecimiento del 26% entre 2020 y 2022, alcanzando los 3,4 millones de contagios, y otro incremento del 10% en 2024. En este contexto, representantes de 23 países se reunieron en julio en San Pablo para definir estrategias coordinadas ante un problema que avanza más rápido de lo que los sistemas de salud pueden contener. Del encuentro surgió un documento con 15 recomendaciones que buscan fortalecer el liderazgo político y financiero, ampliar el acceso al diagnóstico y tratamiento y mejorar la vigilancia epidemiológica.
La sífilis es causada por la bacteria Treponema pallidum. Tiene cura, pero si no se trata a tiempo puede provocar lesiones y daños permanentes. “Las lesiones pueden aparecer en los genitales, la vagina, el ano o la boca; pueden ser visibles o no. La úlcera inicial desaparece entre las 3 y 6 semanas, pero eso no significa que la enfermedad se haya ido: sigue avanzando”, señala el Dr. Adrián Rosa. El contagio ocurre principalmente por vía sexual, aunque también puede transmitirse durante el embarazo y causar graves complicaciones en el bebé. El diagnóstico temprano resulta clave.
Tal como publica TN, el tratamiento se basa en una inyección de penicilina, disponible de manera gratuita en hospitales públicos y privados. La prevención, en cambio, depende de un único recurso: el preservativo. No existe otra forma de evitar la transmisión. “Detrás de cada persona con sífilis hay otra que la contagió. Por eso es fundamental avisar a las parejas sexuales, actuales y pasadas, para que todas reciban tratamiento y así cortar la cadena de transmisión”, concluye Rosa.
Fuente: TN