Chipo: entre libros y sueños con la naranja

Nada hacía pensar aquel 27 de diciembre de 2019, festejando el título de campeón juvenil con Villa Mitre luego de vencer a Bahiense del Norte (el primero de la institución en su historia), que algunos meses después la realidad de Iván Gomez Lepez pasaría por días de encierro entre libros y entrenamientos en casa.

«Este año empecé a estudiar en la Uns, Licenciatura en Ciencias de la Educación. Lo hago de manera virtual y como estamos en cuarentena, aprovecho para dedicarle mucho tiempo a la lectura. Me levanto temprano para leer porque es mucho material», comentó.

La idea de Chipo para este año era estudiar y jugar, repartiendo sus días con el cotidiano viaje en la 319 hacia Bahia Blanca. Pero la llegada del coronavirus hizo replantear los objetivos.

«Ya me había organizado para cursar la carrera y los entrenamientos con Villa Mitre. Pero todo cambió y me adapté. Curso la carrera virtualmente y entreno en casa junto a mis hermanos. Hago gimnasio todos los días y entreno técnica individual con Franco Rutinelli», agregó.

Iván es el más grande de 4 hermanos. Lo siguen Tomás (14) y los mellizos Lionel y Mateo (12); los tres desde este año en Olimpo.

«Nos armamos elementos de trabajo para entrenar todos los días en casa, tanto físico como dribling. Lo hacemos en el garaje, en el living y cuando está lindo en el patio. Desde que comenzó la cuarentena no paramos ningún día», explicó.

Chipo tiene 18 años (los cumplió en noviembre del año pasado) y para éste año eran varios objetivos: Liga Junior, torneo de juveniles, Torneo de Primera y Liga Argentina siempre defendiendo los colores de Villa Mitre que a fines de 2019 compró su pase.

«A veces la ansiedad me gana, porque también pienso en el Provincial U19, porque al ser mi último año como menor, me gustaría poder jugarlo. Pero hay que tener paciencia y seguir entrenando. Pero es inevitable extrañar los entrenamientos, los amigos y la cancha», indicó.

«Quiero ser jugador profesional de básquet, es mi sueño y para eso entreno y me cuido; pero también tengo claro que en paralelo voy a estudiar. Ambas cosas van de la mano, no se trata de elegir descartando una», explicó el estudiante de Ciencias de la Educación.

Chipo llegó a Bahia Blanca en 2015. Se puso la camiseta de Bahiense del Norte luego de vestir en Punta Alta la de Los Andes.

Fue campeón local, provincial y argentino U 15. Campeón Provincial de Clubes U 17, de selecciones y subcampeón argentino de la misma categoría.

Tres veces fue ternado como el mejor jugador de su categoría (desde u 15 hasta U 19 el año pasado).

En 2019 surgió el interés de Villa Mitre que con 17 años, lo llevó a préstamo para debutar en el Torneo Federal. También el año pasado tuvo su estreno en la Liga Argentina.

«Antes de la cuarentena mi día pasaba por entrenar doble o triple turno, además de hacer gimnasio. A eso le sumo una dieta nutricional con Paula Larreguy. Terminé sexto año con más de 40 faltas (se ríe) por las giras de la liga y el torneo provincial con Bahia Blanca», explicó.

«¿Si para mí es un sacrificio entrenar tanto? Para nada, hago lo que me gusta». Simple. Así es Chipo.

En cuarentena, entre libros y sus sueños con la naranja.

Quique Gomez Lepez