El Comando de Instrucción y Evaluación de la Infantería de Marina (COIE) celebra su vigésimo aniversario, fecha que invita a interiorizarse acerca del trabajo de quienes son responsables del adiestramiento del personal que integra las unidades de la Infantería de Marina.
“Sabiduría y trabajo para la excelencia” es el lema que marca el norte de quienes, enfocados en el adiestramiento, trabajan a diario para lograr los mejores resultados en el cumplimiento de la tarea.
El combate moderno y las nuevas exigencias del contexto global impulsaron en 1996 un Estudio de Estado Mayor de reorientación del proceso de modernización de la Infantería de Marina. El mismo concluyó en el 2001, momento en el que se elevó un proyecto para descentralizar la capacitación del personal perteneciente al componente terrestre.
Con dependencia orgánica del Comando de la Infantería de Marina, por resolución del Estado Mayor General de la Armada del 10 de octubre del 2002 se estableció la creación del COIE, instrumento orgánico orientado a incrementar la eficiencia del adiestramiento. Esto se logró mediante el perfeccionamiento de la capacitación profesional y la sistematización del adiestramiento en técnicas de conjunto en apoyo a las organizaciones de combate.
Para esto cuenta con una infraestructura de 15 pistas emplazadas en la Base de Infantería de Marina Baterías, que responden a diferentes tipos de adiestramiento para formar tanto al combatiente individual como las fracciones de combate. Entre las mismas se encuentran la pista de combate urbano, la torre multipropósito y una pista acuática militar. Además, se refaccionaron y pusieron en funcionamiento nuevos polígonos y las pistas de liderazgo. También cuenta con una pista de conductores y otra de combate cuerpo a cuerpo.
Como prueba inicial, el comando debió afrontar el alistamiento de personal de Cascos Azules de la Armada Argentina que se desplegó durante el 2004 en la isla de Haití. Para esto debieron evaluarse y reverse los estándares que tiene la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para poder cumplir con la misión de restablecimiento de la paz. Ese mismo contingente debió afrontar las consecuencias de la catástrofe natural ocasionada por el paso del huracán Jeanne, circunstancia que puso en evidencia la excelente preparación profesional del personal.
La misión en la isla continuó durante 11 años; y se sumaron las tareas en Chipre. En este punto es importante destacar el carácter dinámico del COIE y la importancia de la actualización permanente. Se trató y, hasta el día de hoy se trata, de un trabajo colaborativo entre este Comando y la ONU a fin de llevar a cabo una evaluación y revisión permanente de las doctrinas con el objetivo de actuar en escenarios cambiantes.
Los años sucesivos devinieron en tareas tendientes a brindar apoyo en la instrucción y adiestramiento de las unidades de combate para lograr que se encuentren en condiciones para enfrentar los desafíos que se presentan. Asimismo, los cursos también recibieron personal de otras Fuerzas Armadas, de Seguridad y de instituciones civiles, como fue el caso del equipo de rugby “Los Pumas” en 2003, quienes participaron de una actividad de integración de grupo humano.
Las tareas del Comando incluyen una variada gama de actividades de distinta naturaleza que se dan de manera continua a lo largo del año, como son la impartición de distintos cursos; incorporación de Marineros Tropa Voluntaria; alistamiento para misiones de paz; evaluaciones diagnósticas a las unidades de Infantería de Marina; y apoyo de instrucción a otras Fuerzas. Todo esto conlleva un importante esfuerzo en la organización, coordinación y preparación de la enseñanza y evaluación.
En este punto se vuelve protagonista la figura del instructor, rol desempeñado por personal de la Armada del cuerpo profesional, suboficiales y personal civil. Son ellos quienes se capacitan constantemente a fin de mantenerse actualizados y conocer la especificidad de cada actividad de adiestramiento. Conocer las normas de seguridad de cada pista, las aptitudes a evaluar y el seguimiento según objetivos son tareas que implican profesionalismo y compromiso con el proceso de capacitación del cual es responsable cada instructor.
Más de 5.000 personas pasan cada año por las diferentes pistas de adiestramiento del el COIE. Tanto civiles como militares logran en cada actividad de instrucción obtener conocimientos específicos y actualizados que le serán de valiosa utilidad para la misión que tienen por delante.
Gaceta Marinera