Un hombre de 65 años se convirtió en las últimas horas en la primera víctima fatal por coronavirus en Bahía Blanca.
El paciente, que se encontraba internado en el Hospital Penna, había viajado a Chile y presentaba problemas de salud previos como obesidad e hipertensión.
El hombre llegó a Bahía Blanca el 16 de marzo y once días más tarde comenzó con los síntomas.
Por su parte, ingresó a la unidad de cuidados intensivos el 30 de marzo, por una neumonía.
«Es lamentable lo que pasó, pero está dentro de las posibilidades. En algún momento mejoró, pero nunca pudo salir de la asistencia ventilatoria. Tenía un compromiso pulmonar bilateral severo», reveló el director del centro médico, Gabriel Peluffo, en diálogo con el programa Nunca es Tarde, de LA BRÚJULA 24.
«Tenía los pulmones con severas consecuencias producidas por el COVID y eso sumado a las patologías previas, generaron el fallo respiratorio y el desenlace fatal», dijo.
Peluffo mencionó que el fallecimiento se produjo alrededor de las 16:30 y que sus familiares ya fueron informados.
«Este hombre entró con un síndrome neumónico grave y con el paso del tiempo, esta patología inicialmente viral, se transforma en una lesión estructural», graficó.
El estado de los otros pacientes internados en el Penna
Por otra parte, Peluffo mencionó que la enfermera puntaltense presenta un compromiso pulmonar leve y que fue internada por control y debido a la persistencia de un cuadro febril.
«Es una persona joven, sin factores de riesgo, por lo que creemos que debe evolucionar bien», mencionó.
Por otra parte, con respecto al paciente de 57 años, mencionó que se encuentra en una situación intermedia, ya que recién hace pocos días pudo salir de la asistencia ventilatoria.
«Si uno llega al respirador, la evolución será lenta. Así es el caso de este hombre que sigue en una situación delicada, pero estable», completó.
Fuente: La Brújula