La escritora bahiense Alicia Mabel Partnoy, sobreviviente de La Escuelita, tuvo un rol protagónico en la recuperación del nieto 140. Su relato sobre el horror de lo vivido en el centro clandestino de detención que funcionó en terrenos de la Guarnición V Cuerpo de Ejército, sirvió para guiar la investigación de Abuelas de Plaza de Mayo. Esa búsqueda tuvo un final feliz y en las últimas horas se hizo el anuncio del hallazgo del hijo de Graciela Alicia Romero y Raúl Eugenio Metz, también bahienses. Este martes, en La Brújula Televisión, Adriana Metz Romero, hermana de Raúl, celebró lo que consideró una alegría «colectiva».
En diálogo con el periodista Germán Sasso en «Bahía Hoy», Partnoy, actualmente radicada en los Estados Unidos después de ser obligada al exilio, resaltó la labor de los medios de comunicación, así como de Abuelas y de Hijos, en la búsqueda de los nacidos en cautiverio.
“La sociedad nos ayuda a que alguien diga que no conoce su historia, o que no sabe dónde está su partida de nacimiento, o a que advierta que su familia elude información. Todo eso hizo que se juntara un rompecabezas”, dijo. La mujer, que estuvo dos meses privada de la libertad en la cárcel de Villa Floresta y dos años en Villa Devoto, recordó: “estábamos considerados un peligro para la sociedad». «Cuando en enero de 1977 llegó la Cruz Roja a Villa Devoto, yo intento denunciar esto porque sabía el nombre de la madre (Graciela Romero) y que había dado a luz”.
Partnoy recordó -tal como lo relató en 1999, al declarar en la primera etapa de los Juicios por la Verdad- haber visto a Graciela Romero, con quien compartían habitación, “caminando con los ojos vendados alrededor de una mesa para acelerar el parto”.
“Me identifico mucho con las madres porque mi hija tenía un año y medio cuando me secuestran. Por eso pedí que me dejaran asistir a Graciela en el parto. Cuando me hacen lavar los platos, incluyen una ensaladera verde grande que, según me dijeron, iban a utilizar durante el parto. No me permitieron ayudarla y después ella me alcanzó a contar que había dado a luz a un varón y que estaba bien», rememoró.
Partnoy señló que, en diciembre de 1981, cuando Estela de Carlotto y otra integrante de Abuelas de Plaza de Mayo la visitan en los Estados Unidos, comenzó la investigación que permitió localizar a Raúl. “Lloré mucho cuando recibí la noticia”, dijo Alicia.
Fuente: La Brújula 24