La Estación Almirante Barilari de la Base Naval Puerto Belgrano fue el escenario donde se realizó un emotivo acto del que fue protagonista una figura de la Virgen Stella Maris. La misma fue donada por el destructor ARA “Sarandí” y recibida por los integrantes de la Agrupación Veteranos de Guerra «2 de Abril de 1982».
Estuvieron presentes en el acto el Subjefe de la Base Naval Puerto Belgrano, Capitán de Navío Martín Laborda Molteni; el Segundo Comandante del destructor, Capitán de Fragata Pablo Miranda; y el Presidente de la Agrupación de Veteranos de Guerra, Suboficial Mayor (RE) VGM Juan Fernández. También acompañaron dotación de la unidad de la Flota de Mar, Veteranos de Guerra de Malvinas e invitados especiales.
Inicialmente tomó la palabra el Presidente de la Agrupación quien agradeció la presencia de todos y explicó: “La donación es un gesto de solidaridad importante, principalmente tratándose de la imagen de la Virgen Stella Maris y viniendo de una unidad de la Flota de Mar. Nosotros, los Veteranos, la recibimos con alegría, con fe y renovado espíritu cristiano”.
Luego explicó que el lugar donde fue recibida la imagen será en el futuro un cenotafio “para que los familiares podamos colocar una placa o rendirle homenaje a los camaradas que partieron al fondeadero eterno”. He aquí la importancia de esta figura de Stella Maris, cuyo restaurado y prolijo aspecto fue fruto del trabajo de la dotación del buque en “muestra de camaradería, compañerismo y generosidad; digno de los hombres de mar”, reafirmó Fernández.
A continuación tomó la palabra el Capitán Miranda quien relató los orígenes de este vínculo: “Luego de una visita de algunos de los integrantes del Centro de Veteranos de Guerra de la BNPB, se gestó parte de este proyecto que en su etapa primaria tiene la entrega y recepción de nuestra Virgen, que luego será ubicada cerca del cenotafio”.
“Esta Virgen que hoy nos acompaña estaba guardada, esperando tener su tiempo y su lugar. Fue ella misma quien guió a la gente del destructor ARA ‘Sarandí’ a seguir esta cruzada. Con la ayuda del capellán de la Flota de Mar, padre Luis Toya, quien la entregó; personal del Arsenal Naval Puerto Belgrano que nos ayudó en su reparación; y la dotación, que ultimó los detalles para que se vea bella y esté lista para ser entronizada”, explicó el Segundo Comandante del destructor.
Finalmente, el capellán castrense Luis Luna bendijo la figura e invitó a los presentes a pronunciar la oración de Stella Maris.
Gaceta Marinera