Amigo fiel: perro olavarriense veló a su dueño hasta el final, fue en la casa velatoria Pinos de Paz, en donde “Osito” no se despegó del féretro de su dueño.
Casi como si se tratara de Hachiko, el perro japonés que nunca pudo superar la muerte de su dueño, una triste escena tuvo lugar en Olavarría después de que un jubilado de casi 72 años falleciera y su perro lo “velara” junto a su familia.
Fue este sábado en la sala velatoria Pinos de Paz cuando “Osito”, un mestizo de alrededor de 4 años, se apostó debajo del féretro de su dueño y nadie pudo sacarlo de ahí, donde se quedó “hasta el final”.
“Vivian los dos solos, en su departamento, y eran muy compañeros. Él dormía debajo de su cama. Hacían mandados juntos, andaban de aquí para allá todo el tiempo”, dijo una sus familiares sobre la relación que tenía este jubilado bancario con su mascota.
“Durante el velatorio estuvo todo el tiempo abajo del féretro de su dueño, nosotros entrabamos y salíamos, por el tema de los turno que impone el protocolo, nosotros nos turnábamos y el seguía ahí”, contó la mujer, quien sobre “Osito”, que terminó acompañando el féretro hasta el cementerio.
“Después nos acompañó en una camioneta, pero no lo pudimos bajar porque en el cementerio no dejan entrar animales, así que quedó en la camioneta, pero por lo menos lo pudo acompañar. Yo hablé con una veterinaria y me dijo que estaba bien que el perro lo pueda ver hasta último momento a su dueño, porque si no el perro piensa que fue abandonado y puede ser muy malo para el animal, se ponen tristes, ansiosos, empiezan a buscarlo y un montón de otras cuestiones que terminan repercutiendo en su salud”
Según contaron los familiares cercanos, “Osito” ahora está viviendo con uno de los hijos de José, su dueño, a quien posiblemente seguirá extrañando día a dia.
Fuente: INFOEME