Javier Milei quiere avanzar con la privatización del Correo Argentino sin el tratamiento de una ley del Congreso. La movida se basa en el estatuto de la empresa, que según la mesa técnica del Ejecutivo, le permite al presidente proceder vía decreto.
En la Casa Rosada se habla de una oferta de compra, pero evitan dar nombres. El encargado de llevar a cabo la privatización de empresas públicas es el exinterventor de Télam, Diego Chaher, que tendrá una unidad ejecutora dentro del Ministerio de Economía que preside Luis Caputo.
Se trata de una de las empresas que el oficialismo excluyó de la lista de privatizaciones que se votó dentro de la Ley Bases en el Senado junto con Aerolíneas Argentinas y Radio y Televisión Argentina. El vicejefe de gabinete, Lisandro Catalán, es uno de los directores titulares.
Con el Estado Nacional como único accionista, el Correo Argentino maneja una red de 1.400 sucursales. A pesar de esto, en 2023, la empresa registró un déficit de $71.322 millones, requiriendo más de $90.000 millones en 2024 para impulsar planes de retiros voluntarios.
Fundada en 1992 por Carlos Menem como ENCOTESA y privatizada en 1997, fue reestatizada en 2003 por Néstor Kirchner. Desde entonces, se rige por la Ley General de Sociedades y un decreto de 2004 que la puso bajo la órbita de comunicaciones “hasta tanto se privatice”.
El gobierno actual también tiene en la mira la privatización de otras empresas como Corredores Viales, AYSA, Tandanor, IMPSA y YCRT. Para las empresas que requieren respaldo legislativo, como Aerolíneas Argentinas y Banco Nación, están preparando proyectos de ley separados.
Fuente: TN