El gobierno de la provincia de Buenos Aires lanzará este miércoles una campaña intensiva de prevención contra el dengue, en respuesta a la preocupación por un posible brote grave de la enfermedad durante el próximo verano. La iniciativa incluye la adquisición de 500 mil vacunas, luego de que las autoridades provinciales señalaran al Gobierno nacional como responsable por la falta de medidas para mitigar la situación.
En una conferencia de prensa liderada por el gobernador Axel Kicillof, el ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, anunció la compra de 500 mil dosis de la vacuna Qdenga, desarrollada por el laboratorio Takeda. Esta vacuna es capaz de cubrir los cuatro serotipos conocidos del virus del dengue y comenzará a aplicarse a partir de octubre. Kreplak explicó que, aunque la compra total es de 1.500.000 dosis, el laboratorio solo podrá entregar 500 mil dosis este verano. Además, se anunció la adquisición de larvicidas, la producción de repelente y un descuento a través de IOMA para quienes deseen vacunarse fuera de la “población objetivo”.
Kreplak advirtió sobre la gravedad de la situación, señalando que es probable enfrentar un verano con un brote de dengue similar al del año pasado, pero con mayor número de casos y severidad. “Tenemos que prever que va a venir un verano de mucha gravedad”, subrayó el ministro, destacando la necesidad de actuar con seriedad ante la amenaza de la enfermedad.
En este contexto, tanto Kreplak como Kicillof criticaron duramente al Gobierno nacional por lo que consideran una “inacción absoluta” en la lucha contra el dengue a nivel federal. Exigieron que la Nación intervenga en áreas clave como la educación y la publicidad, advirtiendo que no se puede hacer salud “guiándose en el ajuste”.
Durante el anuncio, también se informó que la provincia ha estado produciendo 5 mil unidades de repelente por día y que se adquirirá larvicida para tratar los reservorios de agua, evitando que se conviertan en criaderos de mosquitos transmisores del virus. Estas medidas se complementan con una campaña de concientización para que la población tome medidas preventivas en sus hogares, incluyendo la eliminación de objetos que puedan acumular agua y la fumigación en los casos necesarios.
Fuente: El Día