El acusado se hizo presente en Río Atuel al 200, en donde funciona la delegación de Cibercrimen.
Ayer al mediodía la Justicia había ordenado su detención y finalmente por la tarde se entregó el subcomisario Martín Omar Ñancucheo, acusado de participar en una banda que robaba cables, luego de la muerte de los cuatro delincuentes electrocutados.
El fiscal a cargo de la investigación Gustavo Zorzano había hecho la solicitud y hoy hizo lugar el Juzgado de Garantías N°1, luego de entender que hay pruebas evidentes en contra del implicado.
Ñancucheo se hizo presente en Río Atuel al 200, en donde funciona la delegación de Cibercrimen, luego de que la Policía Federal fuera a buscarlo a los sitios donde frecuentaba, sin encontrar rastros suyos.
A la espera de ser indagado por el fiscal, probablemente mañana por la mañana, quedará detenido en un calabozo.
El hecho que descubrió la trama fue el 7 de este mes, en la Ruta 33, donde un grupo de delincuentes recibió una descarga de más de 30.000 voltios al intentar robar cables. Por el hecho murieron cuatro de ellos, y uno sobrevivió. Todos habían sido dejados en la puerta del Hospital Municipal, dentro de una VW Amarok.
Finalmente se detectó que quien realizó la maniobra fue Ángel Daniel Gallardo, de 63 años, padre de Fernando, de 25 años, una de las víctimas fatales. En ese acto también perdieron la vida Facundo Uribe (32), Joaquín Acosta (18) y Federico Strick (28).
Emanuel Chamorro Sepúlveda, de 20 años, recibió el alta hace algunos días y también está arrestado.
Fuente: Frente a Cano