La flamante norma establece un sistema único para identificar los talles de las prendas según medidas estandarizadas en todo el país que se actualizan cada diez años.
A partir de ahora, los talles deberán ser iguales en cualquier tienda de cualquier parte del país. Con la nueva Ley de Talles sancionada la madrugada del jueves en el Congreso de la Nación, los usuarios ya no deberán toparse con un pantalón etiquetado con un 38, por ejemplo, que mide más o menos centímetros que otro clasificado bajo el mismo número en otro lugar.
Es que el texto de la norma -que aún no fue publicado en el Boletín Oficial y deberá ser reglamentado- establece un sistema único para identificar los talles de las prendas para mayores de 12 años según medidas estandarizadas.
El Sistema Único Normalizado de Identificación de Talles de Indumentaria (SUNITI) regirá para fabricantes, comerciantes e importadores y se actualizará cada diez años, de acuerdo a estudios antropométricos de la población argentina llevados a cabo por el Estado. Para fabricar la primera base de datos, el INTI ya lleva a cabo un relevamiento federal.
La legislación también indica que la indumentaria debe contar con etiquetas “de fácil comprensión para el consumidor” y obliga a los locales a “garantizar condiciones de atención y trato digno y equitativo”, sin “desplegar conductas que coloquen a los consumidores en situaciones vergonzantes, vejatorias o intimidatorias».
Una de las organizaciones clave en la sanción de la ley fue AnyBody Argentina, quien a partir de su encuesta anual de 2018 demostró que casi el 70 por ciento de los consumidores de entre 11 y 88 años tiene problemas, siempre o frecuentemente, para adquirir ropa acorde a su contextura física. “Una cifra que, en términos generales, sigue constante a través de todas nuestras encuestas desde 2012”, aclaran.
Si bien ya existía una docena de legislaciones provinciales para fomentar la diversidad y disponibilidad de talles (la bonaerense es la más antigua), basta con hacer un breve recorrido por los locales céntricos para advertir cómo se propagan los talles únicos y los etiquetados que difieren por completo entre distintas marcas.
Cuando la norma nacional entre en vigencia, quienes incumplan sus disposiciones serán sancionados según las leyes 24.240 de Defensa del Consumidor y 23.592 de Penalización de Actos Discriminatorios.
En las redes sociales, decenas de usuarios celebran la iniciativa y cuentan experiencias desagradables en diversas casas de ropa.
Fuente: InfoCielo