Con el inicio del año 2020 y de una nueva década, los números relevados en los últimos diez años muestran que la violencia de género no cesa en Argentina: entre 2010 y 2019, se estima que más de 3000 mujeres fueron víctimas de femicidio.
Los datos recabados por el Observatorio Mumalá “Mujeres, Disidencias, Derechos”, recuperando información de organizaciones de la sociedad civil como La Casa del Encuentro, detallan que desde el 1 de Enero de 2010 hasta el 31 de Diciembre de 2019, hubo 3013 víctimas de femicidios de mujeres de manera directa, travesticidios; mujeres y niñas víctimas de femicidios vinculados.
Son 2.749 las mujeres asesinadas, y 264 los femicidios vinculados de niños y varones que ocurrieron en la década. Como consecuencia, 3295 niños, niñas y adolescentes se quedaron sin madre, que murió en manos de un hombre. Si se tiene en cuenta los últimos diez años, se estima que hubo 275 víctimas promedio por cada año.
En 2019, la cifra contabilizada de femicidios ascendió a 284, lo que evidencia que hay una víctima de violencia machista cada 31 horas. De las muertes, 247 fueron femicidios directos, 13 vinculados de mujeres o niñas, 17 casos de muertes vinculadas de varones o niños, y 7 travesticidios.
Respecto del vínculo de las víctimas con el agresor, en 2019 seis de cada diez víctimas fueron asesinadas por sus parejas o exparejas, y el 62% de los asesinatos se cometieron en el propio domicilio de la mujer o en la vivienda que compartía con su agresor.
“La cifra que abordamos nos da 3.013 femicidios en total (…) con varios registros pudimos realizar este informe de los femicidios en los últimos diez años», dijo Silvia Ferreyra, coordinadora nacional del movimiento feminista Mumalá a Sputnik sobre lo relevado en la última década.
En relación a las denuncias realizadas entre 2010 y 2019, en promedio, el 17 % de las víctimas habían realizado denuncias por violencia de género antes de ser asesinadas. Esto, señalan desde Mumalá, “pone a la luz unos de los datos más preocupantes” ya que el promedio de las víctimas que había realizado denuncias previas es muy bajo.
En su análisis, corroboraron además que las mujeres recurrieron en mayor porcentaje al Estado para denunciar en los años 2015 (20 %) y en 2018 (21%), y argumentaron la importancia de que ambos fueron años “atravesados por fuertes luchas del movimiento de mujeres e identidades disidentes (Ni Una Menos, Aborto Legal, Seguro y Gratuito)” que se instalaron “en el espacio público, político, medios de comunicación”.
Desde el observatorio realizaron también una crítica a lo que consideran una inacción del Estado, al que le reclaman que a 10 años de la sanción de la ley 26.485 el presupuesto previsto para ese fin no alcanzó un dígito del presupuesto nacional.
“No se obtuvieron respuestas por parte del gobierno de Mauricio Macri, como así tampoco de las instituciones encargadas de ejecutar políticas públicas para abordar esta problemática”. Lejos de debates partidarios, aclararon que sucedió “de igual manera en el gobierno de Cristina Fernández”.
Como política urgente del Gobierno, piden la implementación federal del “Plan Nacional de Acción para la Prevención, Asistencia y Erradicación de la Violencia Machista”, y apostaron a que el nuevo Ministerio de la Mujer creado por el presidente Alberto Fernández sea el puntapié para hacer que la violencia de género sea una política de Estado. “Saludamos la creación del Ministerio de la Mujer, y en él un área específico para abordar las violencias y esperamos que como dijo el presidente al asumir, el #NiUnaMenos sea política de Estado”, expresaron.
Fuente: Perfil