Vigier: «Esto llevará a un replanteo en la educación y el uso de medios virtuales»

A partir de la disposición del Aislamiento Preventivo, Social y Obligatorio, la UPSO suspendió todas las actividades que implican actividad presencial, tanto lectivas como administrativas, y las redirigió a través de canales digitales.

Un replanteo en la educación y su modalidad a distancia; el desarrollo de métodos para solucionar los problemas de conectividad y, sobre todo, un necesario cambio de mentalidad. Para el rector de la Universidad Provincial del Sudoeste, Hernán Vigier, estas pandemia y posterior cuarentena a causa del COVID-19 significan una oportunidad evolutiva para todo el sistema educativo argentino.

“Todo esto llevará a un replanteo de la educación y la utilización de medios virtuales en ella, y nos dará una oportunidad de ahondar en la gestión de la enseñanza. Era algo que, tarde o temprano, iba a terminar ocurriendo”, aseguró.

La disposición presidencial de imponer un Aislamiento Preventivo, Social y Obligatorio encontró a la UPSO bastante preparada para hacerle frente y seguir trabajando casi normalmente. Hace años que tiene en funcionamiento su campus virtual, muchas clases se dictan bajo esa modalidad y su personal administrativo ya venía realizando prácticas de teletrabajo.

“Toda crisis genera una oportunidad. Lo bueno que tiene todo esto, es que nos tendremos que acostumbrar a la idea de que muchos sistemas de enseñanza que tenemos y que creíamos que no tenían otra forma de desarrollarse, se pueden hacer de una manera diferente”, sostuvo.

“Esto nos llevará a hacer un replanteo de cómo hacer las cosas y del modo que tenemos de pensar sobre la educación a distancia”, añadió.

Vigier reconoció que si esta cuarentena se mantiene en el tiempo, será necesario resolver algunas cuestiones vinculadas específicamente con la enseñanza a través de métodos virtuales.

“El tema de la administración está bastante bien resuelto, pero tenemos que mejorar cosas como la conectividad, porque hay alumnos que no tienen acceso a la red y terminan quedando afuera. Muchos no tienen ni computadora ni celular: ese es otro tema a resolver”, afirmó.

Lo mismo ocurre con las materias que demandan presencialidad en el terreno, como las prácticas en hospitales o la instalación de energías renovables, por ejemplo.

Desde el 1 de abril pasado, la UPSO dio comienzo a su ciclo lectivo 2020 con el dictado de unas 200 asignaturas en forma virtual en sus más de 25 sedes en toda la región. Solo entre el 2% y el 3% de las materias planeadas para este cuatrimestre no pueden desarrollarse normalmente debido a la cuarentena.

“Veremos cómo solucionar estas cuestiones: algunas podrán arreglarse con ingenio por medios virtuales, y por otras habrá que esperar. Por ahora, tenemos un conjunto de medidas tomadas hasta el lunes 13, pero ese día seguramente habrá que decidir otras nuevas”, aclaró.

Al respecto, Vigier recordó que la UPSO venía desarrollando un sistema de educación a distancia, no como una forma de eliminar las clases presenciales, sino más bien como un buen complemento a la enseñanza tradicional.

“Hace años que veníamos trabajando con plataformas de teleconferencias; incluso capacitamos a nuestros profesores para dar clases por estos medios, ya que no es lo mismo que estar frente a una clase. Todo esto nos permitió no tener que empezar desde cero”, dijo.

En cuanto a los problemas que pueda traer la cuarentena, señaló que aún no hay un diagnóstico que relacione esta situación con la posible deserción de alumnos.

“Más allá que estamos acostumbrados a trabajar en un ámbito de conectividad virtual, todo esto genera una costumbre diferente. Tampoco sabemos qué tanto puede repercutir en nuestro presupuesto, ya que gran parte de él se destina al traslado de docentes, algo que en estos momentos no está ocurriendo”, reconoció.

— «Hace años que estamos trabajando con este sistema»

Según Vigier, no es lo mismo tener “un profesor viajero”, que viaje especialmente una o dos veces por semana a dar una clase, que tenerlo toda la semana a través de medios digitales.

“Por eso implementamos herramientas que se vinculan con la educación y clases a distancia, y teleconferencias. Para muchos es nuevo, pero nosotros venimos trabajando desde hace años con la plataforma Zoom -NdR: sistema de videoconferencia o de reuniones virtuales, accesible desde computadoras tradicionales y desde aparatos móviles-”, señaló.

En la actualidad, se está trabajando (virtualmente) en todas las sedes que la UPSO tiene en la región. En Bahía Blanca ocurre algo similar.

— Convocatoria de voluntarios en toda la zona

La UPSO llevó a cabo una convocatoria de voluntarios en los distintos distritos donde tiene sedes en funcionamiento en toda la región. La idea fue proveer a los municipios de un listado de personas que estén dispuestas a colaborar en algún tipo de actividad que requieran las autoridades sanitarias del ámbito que corresponda.

“Tuvimos muchos postulantes, que hemos dividido por distrito. A esto le sumamos un relevamiento adicional, vinculado especialmente por las cuestiones de riesgo de salud que puedan tener –contó Vigier-. Ese listado lo pusimos a disposición de los diferentes municipios”.

En Pigüé, una de las primeras ciudades donde se elaboró el listado, ya se convocó a los estudiantes de enfermería de la UPSO -que se anotaron en el listado- para que colaboren en el hospital.

Fuente: La Nueva