Los elementos secuestrados se van a analizar, pero un cálculo preliminar indica que se trataría de una evasión tributaria por más de 100 millones de dólares, que se concretó gracias a la triangulación con otros países para evitar pagar al fisco argentino lo que correspondía. Las astronómica cifra proviene de la venta de pescado al exterior.
Mañana, en el programa Bahía Hoy, conducido por Germán Saso, se analizará el caso con la opinión del fiscal Christian Long y se brindarán más detalles, como los nombres, las maniobras y lo que se ha ido encontrando en los allanamientos.
La Operación Pejerrey es ejecutada por agentes de Policía Federal, Prefectura, Aduana y AFIP y se trata de al menos 9 operativos simultáneos en la ciudad y en Buenos Aires.
Los uniformados han incautado documentación y dispositivos electrónicos, en las sedes de las empresas en el puerto, en la ciudad y en domicilios particulares.
Fuentes indicaron a La Brújula que la maniobra muy habitual consiste en que los compradores del extranjero paguen a una empresa (trader) con sede en otro país, por lo general en Europa, el precio real de la mercadería que se exporta. Luego, ese “trader” compra al exportador argentino a un precio muy menor, que alcance para justificar el costo. De esa forma, la ganancia del exportador queda afuera y lo que entra a la Argentina es un importe muy menor.
Fuente: La Brújula 24