Fue para el inicio de la vacunación contra el Covid 19 en nuestra ciudad. Ese día se hizo realidad un sueño de los rosaleños postergado por más de 15 años. Hoy se sigue trabajando en su puesta en valor para permitir el funcionamiento de otras instituciones y organismos estatales.
Años de gestiones ante las autoridades provinciales y del Banco Provincia, un largo proceso de recuperación edilicia y un enorme compromiso del intendente Mariano Uset ante el pedido de todo el pueblo rosaleño, hicieron posible que las puertas del edificio del ex Sanatorio Punta Alta volvieran a abrirse el año pasado.
El abandono y la gran cantidad de hechos vandálicos perpetrados allí, quedaron atrás gracias a la puesta en valor llevada a cabo por el Municipio recuperando el edificio de 5 pisos y 2.500 metros cuadrados, ubicado en la esquina de Urquiza y Colón.
El primer gran avance para hacer realidad el sueño de reabrir esas puertas que permanecieron cerradas durante 15 años, se concretó el 28 de marzo de 2019.
Luego de varios años de trabajo, de gestiones, de rastreo de expedientes, de solicitudes a las autoridades provinciales, se logró que el edificio pase del Banco Provincia a la gestión del Ministerio de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, otorgando luego la posesión del inmueble al Municipio en ese histórico acto de entrega de escrituras encabezando por el intendente Uset en el Teatro Colón.
Ya con las escrituras en mano, desde marzo de 2019 a esta parte, el Municipio continuó con la otra gran parte del trabajo: la recuperación edilicia y puesta en valor.
Primero, gestionar los fondos necesarios y administrar los recursos propios. Luego iniciar la obra de recuperación del edificio, que presentaba un deterioro muy importante en algunos sectores producto de hechos vandálicos que incluso desencadenaron en incendios dentro del inmueble,
Luego de haberse completado los trabajos para recuperación de sistema de provisión de agua, cloacas, pluviales, reparación de techos, instalación eléctrica completa y recuperación de ascensores, en marzo de 2021 comenzó a funcionar el Centro de Monitoreo.
Posteriormente, el 7 de abril se inició allí la campaña de vacunación contra el Covid 19, lo que marcó la reapertura al público de ese edificio después de más de 15 años, donde miles de rosaleños recibieron su vacuna en los boxes reconstruidos de la planta baja, en un espacio cómodo y renovado.
En un futuro cercano, el edificio funcionará como un gran centro cívico y será sede de una gran cantidad de áreas provinciales y municipales, incluso algunas vinculadas a Salud y Educación. También desde hace varios meses, las ONG Metamorfosis e Involucrate se encuentra funcionando en una oficina del edificio de Colón y Urquiza.
Este año, el Municipio continuará con la puesta en valor de los pisos del 1 al 4, con una inversión estimada en $15.000.000, con recursos propios.
Estas obras incluyen la puesta en valor de todas las instalaciones de gas y las baterías de sanitarios, la recuperación de aberturas que fueron nuevamente vandalizadas y las terminaciones de pintura de todo el edificio.