La actividad consistió en el sembrado e izado de nadadores en el mar mediante un helicóptero Sea King de la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros, con asiento en la Base Aeronaval Comandante Espora.
“El ejercicio salió de acuerdo con lo planificado. Los cursantes fueron evaluados por los instructores y por el personal del gabinete psicopedagógico de la CITT, en tierra y en los botes. En los próximos días se hará una crítica final acerca del desempeño de los cursantes”, destacó la Jefa de la División Cursos de Capacitación, Teniente de Navío Florencia Magali Moya.
La actividad contó con el apoyo del Hospital Naval Puerto Belgrano, medios de la base naval y embarcaciones menores de la Flota de Mar.
Sumándose a los nadadores del curso, participaron del ejercicio nadadores de rescate que recalificaron y nadadores activos provenientes de diversos destinos navales.
“Que los cursantes reciban la trasmisión de experiencias de otros nadadores de rescate siempre es necesario, ya que hay gente con muchas ejercitaciones de este tipo y están muy capacitados. Por eso se decidió realizarlo juntos”, concluyó la Teniente Moya.
El curso inició el pasado el 4 de abril y tiene como fecha de finalización el próximo 17 de junio.
La experiencia de los cursantes
El Cabo Segundo Maximiliano Ibazeta, destinado en el destructor ARA “Almirante Brown”, destacó que “la experiencia como cursante fue positiva. Siempre quise poder realizar el curso de nadador de rescate; hace años que miraba los helicópteros de lejos y poder subirme a uno es algo único”.
Por su parte, el Cabo Segundo Joaquín Ojeda, del Arsenal Aeronaval Comandante Espora, resaltó que “el ejercicio final fue una experiencia única y muy buena. El curso fue muy exigente, sobre todo en la parte física, pero pude realizarlo y es algo importante para mi futuro”.
Ambos coinciden en que “poder compartir con gente que tiene experiencia nos da seguridad, porque ellos nos enseñaron y nos dieron consejos. Todos se mostraron predispuestos para que aprendamos y nos aconsejaron en las maniobras que realizábamos”.
“El nadador de rescate cumple un rol muy importante en la Armada Argentina. Y para eso tiene que estar preparado para cualquier situación y saber resolver problemas que pueden surgir en un ejercicio o en cualquier otra circunstancia”, agregó el Cabo Segundo Ibazeta.
Gaceta Marinera