La causa se inició en julio del presente año, a través de un reporte de NCMEC (National Center for Missing & Exploited Children) quienes detectaron el hecho delictivo concretado a través de Facebook y enviaron el alerta para su investigación.
En el procedimiento, llevado a cabo por personal de la Policía Federal, se secuestró un teléfono celular y dos discos rígidos que serán peritados a fin de encontrar mayores elementos de interés para la causa.
Fuente: ANJ