La fotografía la tomaron compañeros de Daiana Heit, licenciada en Enfermería a la que se ve con el bebé entre sus brazos luego de empezar a curar las quemaduras que le causaron las llamas que acabaron con su casa y la vida de sus padres y su hermano mayor.
“Sus brazos fueron refugio, lugar seguro para su dolor. Su contención. La imagen habla por sí sola. Y de eso se trata la enfermería”, dijo su colega Gisel Rach en Facebook al compartir el mensaje original generado por la también enfermera Anita Rodríguez.
Por su parte, la autora del posteo, aseguró que “no hay estadística ni número que mida el dolor y el amor, la empatía y el cuidado del día a día”.
Rodríguez resaltó que “esta foto representa mucho, en estos días en donde me encuentro tan desanimada (…) pero entonces aparecen estas personas; que aman cuidar, que piden equidad laboral y aunque no la tengan siguen dejando el cuerpo”.
Ambas enfermeras destacaron la labor diaria de sus colegas del hospital.
El más reciente reporte médico indicaba que el bebé se encuentra “estable” y “fuera de peligro”.
Fuente: La Brújula 24