Del allanamiento también participó la delegación Tandil del Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires y la Oficina de Rescate de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.
«Constatamos una situación laboral de mucha precariedad. El trabajador vivía en pésimas condiciones en el predio y no percibía una remuneración por su trabajo», señalaron voceros que intervienen en la causa a esta redacción.
La fuente añadió que «el empleador le daba sumas de dinero muy bajas y eventualmente ante encargos de algunos trabajos».
En un comunicado oficial el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires detalló que también «se lo asesoró en materia laboral, complementariamente al abordaje que realizaron el resto de los organismos intervinientes».
Fuente: Frente a Cano