El proyecto pide concretamente que se aplique una ordenanza del año 2008, la 3139, que dispone controles sobre el seguimiento de precios y productos de la canasta básica, » es muy importante llevar tranquilidad a los vecinos en primer lugar para evitar el acaparamiento de mercancías, pero también tenemos que evitar la especulación tal como se viene haciendo en muchas ciudades. Tenemos ordenanzas pero el Municipio debe hacerlas cumplir. La OMIC depende del Intendente en el plano local y creemos que se tienen que efectuar controles de stock de productos de higiene en los comercios y evitar los faltantes o maniobras especulativas que afecten el bolsillo. También los controles locales son necesarios para dar aviso a las autoridades nacionales en caso de incumplimiento de la Ley de Abastecimiento que es una medida anunciada por el Gobierno Federal» afirmaron los concejales de Bien Común.
El gobierno Nacional anunció que cuenta con la ley 20.680 para proteger a la Población, y la ordenanza citada por los ediles de Bien Común fija precisamente mecanismos para denunciar ante las autoridades nacionales y provinciales por faltantes de stock o abusos contra los consumidores.
Otro antecedente citado por los concejales de Bien Común es el decreto municipal 522 del año 2014, del entonces intendente Holzman que reglamentó la ordenanza 3302 –que adhirió a su vez a la Ley Nacional 24.240 y a la Ley de la Provincia de Buenos Aires 13.133, y sus respectivas modificatorias y reglamentaciones por las cuales se implementa un sistema de protección a los consumidores y usuarios de distintos bienes y servicios.
Daniel Medina, presidente del bloque vecinalista remarcó el carácter positivo de la medida y las numerosas inquietudes de vecinos sobre este tema, «nos hacemos eco y le brindamos al gobierno las normas por las cuales puede intentar cuidar a los vecinos de los abusos de precios. Me parece importante citar además la responsabilidad individual que debe darse ante el interés colectivo. Si un vecino va al supermercado y necesita solamente un frasco de alcohol en gel, que no agarre cinco por las dudas. Esta solidaridad es clave, y a eso sumarle el control en favor del consumidor desde el Estado. Este es un aporte positivo y sería bueno que el Intendente lo adoptara dado que es él quien tiene mando sobre las áreas municipales y es responsable de ejecutar las ordenanzas. Nosotros respaldaríamos esta medida plenamente si se ejecuta y aprovechamos la oportunidad para pedir serenidad a la población en este momento.»