Cómo es el nuevo plan climático de Argentina, y por qué emitiría más gases de efecto invernadero

El Gobierno argentino anunció una revisión de sus compromisos climáticos internacionales, lo que abre la puerta a que el país emita más gases de efecto invernadero hacia 2030 que lo permitido en su meta anterior. La decisión fue comunicada este lunes por el subsecretario de Ambiente, Fernando Brom, al presentar la nueva Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC), documento clave para cumplir el Acuerdo de París.

“Estamos tratando de alinear lo que decimos con lo que hacemos. Nuestro trabajo es postular objetivos alcanzables por los argentinos”, expresó Brom en una reunión virtual con periodistas, en la que defendió el cambio al considerar que las nuevas metas son “realistas y progresivas”.

Según el documento, Argentina no superará las 375 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente (MtCO2e) en 2030, lo que implica un incremento respecto a la meta anterior establecida en 2020, que ponía un límite de 349 MtCO2e. Esta modificación se da en la antesala de la COP30, a realizarse en Belém do Pará, Brasil, donde se espera que los países exhiban avances concretos hacia la descarbonización.

La Subsecretaría de Ambiente justificó el incremento al señalar que la NDC 3.0 adopta un “enfoque metodológico actualizado”, basado en el Primer Informe Bienal de Transparencia (IBT1) de 2024, que amplió la base de cálculo de emisiones a un 79% del territorio nacional y a 162 sectores económicos.

Más allá del cambio numérico, el Gobierno remarcó que esta actualización es “indispensable” para que Argentina pueda participar en los mercados de carbono contemplados por el Artículo 6 del Acuerdo de París. “Sin NDC 3.0 no hay mercados de carbono”, subrayaron fuentes oficiales.

Esta metodología, basada en los últimos informes del IPCC, introduce factores de cálculo más completos. Sin embargo, expertos cuestionan si el incremento del tope de emisiones responde a una mejora técnica o a una flexibilización de los compromisos ambientales.

“Ahora resta lo más importante, transformar las palabras en acciones climáticas en el territorio”, afirmó Nazareno Castillo Marín, director nacional de Desarrollo Sostenible y Gestión Climática. Según el funcionario, remarca Clarín, el objetivo es no solo mitigar emisiones, sino también fortalecer la adaptación del país frente a los impactos del cambio climático y promover “un sistema productivo sostenible y bajo en carbono”.

Fuente: Clarín