La normativa reconoce el derecho a la identidad de género y su rectificación registral del género, el nombre de pila o imagen, y otorga el derecho a ser identificadas de acuerdo a la identidad autopercibida, a las personas ciudadanas argentinas mayores de 18 años y, a las menores de edad a través de un representante legal.
A casi diez años de la promulgación de la ley, actualmente hay 12.320 personas con esa rectificación en su DNI, ya que fallecieron 335. De ellas, el 62% optó por la categoría mujer y el 35% por la de varón.
El 3% restante optó por la categoría “X”, no binario, a través del decreto 476/2021, sancionado en julio pasado, que reconoce identidades por fuera del sistema binario hombre y mujer en los sistemas de registro e identificación de las personas. La Argentina fue el primer país de la región en sancionar esta norma y en el primer trimestre de 2022, se realizaron 136 cambios, que en total suman 354.
Las personas que cambiaron su identidad de género en el DNI son en su mayoría jóvenes adultas y tienen un promedio de 33 años, aunque la mitad es menor de 31 y un 4,26% son menores de edad.
El promedio de edad con la que se solicitó el cambio de identidad de género en el registro nacional es de 28 años y el 55% realizó el trámite entre los 18 y 29. Se observó que las personas que hicieron la rectificación por el género varón fue a edades más tempranas, siendo el 16% menores de edad; mientras que aquellas identificadas con el género mujer el 2,76% era menor de 18 años y el 7,57% de las que optaron por el género no binario.
Fuente: La Nación