Esta semana, Cadetes de 4º año de la Escuela de Aviación Militar de la Fuerza Aérea Argentina realizaron el curso de supervivencia en el mar que dicta el Centro de Adiestramiento de la Fuerza Aeronaval N°2 (CIFA).
Los cadetes estuvieron acompañados de la Jefe de Curso, Capitán Carolina Jara, y completaron la delegación el Capitán (RE) Pablo Liska, la médica Marisol Ostorero y los Primeros Tenientes Alexis Marín y Gabriel Andreasen.
El adiestramiento comenzó con clases teóricas donde los cursantes se instruyeron respecto de equipos de seguridad (a fin de identificar todos los elementos útiles que provee un buque ante una situación de abandono), y del equipo individual de supervivencia que se provee a cada tripulante (familiarizándose con los procedimientos de colocación, ajuste y usos de salvavidas).
También aprendieron diferentes técnicas de abandono de una unidad de superficie, reconociendo las partes estructurales principales y la forma correcta de abordar las balsas salvavidas, con la identificación y uso de los elementos de supervivencia que éstas poseen.
Finalmente, incorporaron contenidos teóricos sobre primeros auxilios tanto en altamar como ante la emergencia de un abandono. Toda esta información académica fue también acompañada de prácticas en la pileta cubierta de la Base Aeronaval Comandante Espora (BACE).
Ejercicio Final
Para finalizar el curso de supervivencia, los Cadetes llevaron a cabo un ejercicio final en la Base de Infantería de Marina Baterías, tanto en la zona de costa como en la de monte.
El mismo estuvo coordinado por el subjefe del CIFA, Teniente de Navío Francisco Javier Fragapane, y contó con el apoyo del Arsenal Naval Puerto Belgrano, la BACE y el Batallón de Vehículos Anfibios.
Divididos en patrullas, los cursantes embarcaron en Vehículos Anfibios a Rueda en los que fueron trasladados mar adentro. Allí simularon el abandono de una unidad de superficie en altamar poniendo en práctica las técnicas de ingreso a una balsa, volteo de bote y flotación.
Por la tarde, los Cadetes se marcharon por la zona de médanos hasta un sector de monte donde debieron construir trampas, aprender técnicas de potabilización de agua, empleo de señales diurnas y nocturnas, navegación terrestre y prácticas de primeros auxilios.
El curso finalizó cumpliéndose los objetivos de proporcionarles a los futuros pilotos, conocimientos y destrezas básicas de supervivencia tanto en un ambiente marítimo como en el terrestre costero.
Gaceta Marinera