Posibilitó llevar a cabo un efectivo bloqueo naval a la ciudad que, sumado al sitio del ejército porteño, desembocaría en la toma de la ciudad de Montevideo, bastión contrarrevolucionario y sede del Apostadero Naval más poderoso de la región. Esto permitió a la naciente Revolución el control del Río de la Plata y sus afluentes y proyectar su poder hacia el mar. También contribuye a cerrar un frente militar, facilitando la concentración de recursos en la campaña sanmartiniana.
El Combate Naval de Montevideo (llamado también del Buceo) fue, en palabras de San Martín, la mayor victoria producida por las armas americanas hasta ese entonces y produjo un giro decisivo en la suerte de la guerra.
Argentina Desde el Mar