El consumo masivo cayó y ya se reconfiguran los hábitos de los argentinos

La licuación de los ingresos de los argentinos y la fuerte alza de los precios que se produjo en los últimos dos meses, impactó de lleno en lo más sensible del bolsillo. El consumo masivo cayó en enero –el primer mes completo de Javier Milei como presidente– un 3,8%.

La retracción es “moderada” frente a otros rubros de la economía que sufren más la política de shock del actual Gobierno. En diciembre, por caso, la construcción se desplomó 12,2% y la industria, 12,8%.

Por otra parte, los expertos en la materia creen que la intención oficial de que el precio sea la señal más importante para el mercado reconfigurará no solo hábitos del consumidor sino también de las empresas.

Por el lado de aquellos que van a las góndolas, ya se ven mayores frecuencias de visita a los comercios y menor cantidad de unidades por ticket para cuidar más el gasto en cada compra. A eso se suma la huida, muchas veces gradual, a segundas marcas. La eliminación de los programas oficiales de controles de precios, habría comenzado a borrar la brecha entre canales, supermercados y autoservicios, que había llegado a casi 50% (hasta diciembre mucho más barato comprar en los primeros).

También las industria y los comercios deberán cambiar el foco. Luego de los saltos de precios de diciembre y enero, y ante la caída de las ventas, algunas firmas comenzaron a recalibrar y ya aparecen bonificaciones y promociones.

Además, describen que velozmente se pasó de un mercado de oferta, donde ganaba el que tenía stocks (por las trabas a las importaciones), a uno de demanda, en el que gana el que mejor conecta con las machucadas posibilidades de compra del consumidor. En simultáneo, se pasó de un mercado de abundancia de pesos –que obligaba a gastarlos rápido por la inflación– a uno en el que faltan pesos y el consumidor opta claramente por la cautela.

Los rubros, a nivel nacional y más allá de los canales de ventas, cayeron casi todos en enero: alimentación (-2,6%), desayuno + merienda (-4,5%), perecederos + fríos (-0,5%), limpieza de ropa y hogar (-6,6%). higiene + cosmética (-7,2%) y bebidas con alcohol (-11,3%). El único rubro con alzas fue “impulsivos” (+8,4%).

Fuente: La Nación