Uset alcanzó el sueño rosaleño postergado por más de 15 años
Años de gestiones ante las autoridades provinciales y del Banco Provincia, un largo proceso de recuperación edilicia y un enorme compromiso del intendente Mariano Uset ante el pedido de todo el pueblo rosaleño, hicieron posible que las puertas del edificio del ex Sanatorio Punta Alta vuelvan a abrirse.
El abandono y la gran cantidad de hechos vandálicos perpetrados allí, quedaron atrás gracias a la puesta en valor llevada a cabo por el Municipio recuperando el edificio de 5 pisos y 2.500 metros cuadrados, ubicado en la esquina de Urquiza y Colón.
El primer gran avance para hacer realidad el sueño de reabrir esas puertas que permanecieron cerradas durante 15 años, se concretó el 28 de marzo de 2019.
Luego de varios años de trabajo, de gestiones, de rastreo de expedientes, de solicitudes a las autoridades provinciales, se logró que el edificio pase del Banco Provincia a la gestión del Ministerio de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, otorgando luego la posesión del inmueble al Municipio en ese histórico acto de entrega de escrituras encabezando por el intendente Uset en el Teatro Colón.
“Para llegar hasta allí, recorrimos un camino lleno de dificultades, misterios, expedientes desaparecidos, y silencio. Hubo un gran trabajo silencioso por parte de todas las áreas del Municipio, especialmente de la Secretaría de Gobierno, de la Secretaría de Salud y de la Secretaría de Obras”, destacó el intendente Mariano Uset.
“Fueron horas y horas de reuniones interminables en la ciudad de La Plata con las más diversas autoridades, tanto del fideicomiso del Banco Provincia y las autoridades bancarias poseedoras del inmueble, para que el banco, que había comprado el edificio en un remate cuando la empresa privada del sanatorio quebró, cediera el inmueble al Gobierno de la provincia”, contó el jefe comunal.
“Y luego, todas las gestiones realizadas ante el Ministerio de Salud de la Provincia y del Ministerio de Gobierno de la Provincia para lograr la administración del inmueble desde el Municipio”, contó el jefe comunal.
En ese sentido, la secretaria de Gobierno, Abigaíl Gómez, remarcó que “fue fundamental la ayuda del por ese entonces ministro de Gobierno Joaquin De la Torre, para que el sueño y el objetivo del Intendente Uset al comienzo de su gestión, de volver disponer del edificio, sacarlo del estado de abandono y que sirva a la comunidad rosaleña, sea cumplido”.
En tanto, Gómez remarcó que “en una sola gestión de Gobierno no se hubiera podido cumplir el objetivo debido a los interminables pasos administrativos y gestiones necesarias, por eso es fundamental haber podido contar con este segundo periodo de gobierno para culminar con lo que prometimos”.
Ya con las escrituras en mano, desde marzo de 2019 a esta parte, el Municipio continuó con la otra gran parte del trabajo: la recuperación edilicia y puesta en valor.
Primero, gestionar los fondos necesarios y administrar los recursos propios. Luego iniciar la obra de recuperación del edificio, que presentaba un deterioro muy importante en algunos sectores producto de hechos vandálicos que incluso desencadenaron en incendios dentro del inmueble,
“Hoy, la obra de puesta en valor presenta un avance importante – cuenta el secretario de Obras y Planeamiento, Ignacio Torrontegui -, habiéndose completado ya los trabajos para recuperación de sistema de provisión de agua, cloacas, pluviales, reparación de techos, instalación eléctrica completa y recuperación de ascensores”.
“Sólo resta finalizar la recuperación de la instalación de gas natural, adecuándola a las nuevas normativas vigentes con el asesoramiento de la empresa Camuzzi, y la puesta en valor del sistema de calefacción central de calderas, con el recorrido general de la instalación y la instalación de nuevas calderas, ya que las anteriores habían sido retiradas del edificio luego de su cierre”, aseguró Torrontegui.
Luego de un gran trabajo y un esfuerzo permanente, el edificio reabre sus puertas para ser el principal centro de vacunación de Punta Alta contra el COVID 19, siendo de gran utilidad para recibir en un espacio cómodo y renovado a los miles de rosaleños que serán vacunados en el marco de la pandemia.
“Soy testigo directo del enorme trabajo que hizo esta gestión liderada por Uset para poder recuperar este edificio. Y que su uso, actualmente, se destine a la campaña de vacunación nos produce una gran satisfacción”, señaló el secretario de Salud Carlos Gabbarini.
En un futuro cercano, el edificio funcionará como un gran centro cívico y será sede de una gran cantidad de áreas provinciales y municipales, incluso algunas vinculadas a Salud.
Próximamente funcionarán en el edificio de Urquiza y Colón, las áreas de Laboratorio y Bromatología del Municipio. También se mudará a la planta baja del inmueble el Registro Provincial de las Personas, permitiendo un cómodo acceso a la población, algo que no sucede en el actual edificio de Paso y Rivadavia.
También funcionarán en la planta baja del ex sanatorio el Centro de Monitoreo de la Policía y la Ayudantía Fiscal.
La totalidad de las áreas y organismos de Educación que funcionan en el distrito, la Universidad Provincial del Sudoeste y varias ONG´s del distrito, también se mudarán al edificio del ex Sanatorio, ocupando los pisos superiores, donde continúan llevándose a cabo los trabajos de puesta en valor.