Esta iniciativa creada por el ministerio de Economía buscaba acabar con las especulaciones e incentivar a los productores y agroexportadores a que vendieran su última cosecha de soja. Si bien desde el Gobierno nacional estimaron que de esta manera ingresarían al país unos 5.000 millones de dólares; a falta de una semana para el cierre de la medida, ya son 6.000 millones los dólares ingresados.
En ese plano el ministro de Economía, Sergio Massa, aseguró que la implementación del programa «ha sido un éxito muy importante tanto para la movilización económica de nuestra producción como también para la contribución a las reservas argentinas y la agenda de seguridad global alimentaria».
Mediante su cuenta de Twitter, a la que prácticamente a volcado toda su información oficial, informó que «hasta el día viernes a las 15hs se podrán realizar operaciones de acuerdo a valores de pizarra. Luego, solo se podrán completar los trámites administrativos de dichas operaciones».
Además el ministro agradeció «el acompañamiento y trabajo del campo a esta medida a lo largo de estas semanas» y los invitó «a trabajar los 5 días restantes con el mismo empeño, transparencia y profesionalismo».
Por último adelantó que este viernes 30 de septiembre «haremos la evaluación final para contarle a la sociedad argentina los resultados».
El sector insiste con la baja de impuestos
En tanto desde la Cámara de la Industria Aceitera Argentina (CIARA) destacaron el programa pero pidieron que el Gobierno vaya más allá y modifique el régimen tributario del sector. En ese sentido manifestaron que «la cadena de soja está en condiciones de aumentar su producción y exportación si se alivia la pesada carga tributaria, que es la más alta de toda la economía nacional».
«Propiciamos reglas transparentes y previsibles en materia de producción, comercialización, impuestos y tipo de cambio competitivo» sostuvieron y añadieron que «también solicitamos que el Banco Central de la República Argentina revea las medidas restrictivas lo antes posible».
Fuente: Perfil