La variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec de enero fue del 2,2% mensual, la más baja desde julio de 2020, y del 84,5% interanual, la primera vez en dos años que perfora las tres cifras. Sin embargo, la apertura del indicador explica por qué el Gobierno de Javier Milei presta especial atención a los incrementos en los que tiene algún grado de influencia. En despachos oficiales destacan el efecto de las expectativas de continuidad en el ajuste fiscal y monetario.
Las categorías del IPC que registran mayores incrementos son Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (217,7%), Educación (168,6%) y Comunicación (134,3%), las únicas con variaciones de tres dígitos. Por su parte, las divisiones con menores aumentos son Equipamiento y mantenimiento del hogar (54,2%), Prendas de vestir y calzado (63,7%), y Alimentos y bebidas no alcohólicas (64,7 por ciento).
“La inflación continúa bajando. La percepción de la gente sobre este tema no se mueve en la misma dirección. Actualmente el 55% manifiesta que en su vida diaria no se nota que el aumento de precios se haya desacelerado”, escribió en su cuenta de X Mora Jozami, directora de Casa Tres, en referencia al dato de IPC difundido el último jueves y a una encuesta realizada por su consultora.
Las últimas definiciones de Luis Caputo se enmarcan en ese proceso de cambio de los precios relativos. El Gobierno buscará que los aumentos de tarifas en el año no superen a la inflación, que en el proyecto de Presupuesto 2025 es del 18,3% anual o 1,4% promedio mensual. Aunque la baja de subsidios y un mayor consumo de electricidad durante el verano generarán facturas más abultadas.
El Ministerio de Economía decidió postergar en febrero el incremento en el Impuesto a los combustibles líquidos, que suele trasladarse directo a los consumidores, para que la suba promedio del mes en nafta y gasoil a nivel país no supere el 2%, tras la presión derivada del aumento del precio internacional del crudo. Desde mayo de 2024, ese tributo se actualizaba en 1% cada mes.
De todos modos, el Gobierno sigue de cerca lo que suceda con el dólar. En febrero redujo del 2% al 1% los ajustes mensuales del tipo de cambio oficial -crawling peg- y desde diciembre aceleró significativamente las intervenciones del Banco Central sobre la brecha cambiaria.
Fuente: Infobae