Una chica de 18 años denunció que fue víctima de abuso sexual en una casa a donde fue con su prima y un grupo de chicos cuando salieron del boliche, pasadas las seis del último domingo.
En contacto telefónico con el programa “Punta Noticias Radio” el padre de la joven, Alejandro, dijo que “en la familia estamos destrozados y tratando de reconstruir nuestras vidas”.
“La policía estaba más preocupada por un vidrio roto que por el estado de mi hija, a la que encontré sola y sentada en una camilla en la comisaría de la mujer. No existió ningún tipo de contención”, dijo.
Acotó que la prima, testigo de lo ocurrido, también se encontraba sola en otra parte de la dependencia policial. “Es de no creer todo lo que pasó, pero ni siquiera tenían lo mínimo para ayudar a mi hija. Inclusive los estudios los tuvimos que hacer en Bahía Blanca porque acá no disponían de nada”, relató.
El hombre dijo que “uno cree que estas cosas nunca le van a pasar y cuando nos vemos involucrados en un sistema perverso, como si fuera un lado oscuro de la sociedad que nadie mira, es difícil”.
“Pasás de la sorpresa al dolor, del dolor al enojo y de la bronca y ira. Quedás a la vera de tu conciencia, de lo que podés manejar”, expresó en referencia a lo vivido tras conocer lo que le había sucedido a su hija.
“Nadie cuidó a la víctima que es mi hija, inclusive los violadores la llevaron al cajero automático para que saque plata, todo en presencia de la policía. Una vergüenza todo lo sucedido, dejando de lado a quién sufrió la violación”, acotó.
“Como familia estamos viviendo una situación muy compleja y dolorosa, sobre todo mi hija que prácticamente fue abandonada al radicar la denuncia”, cerró.