El presidente Alberto Fernández afirmó que «los sectores más débiles van a seguir siendo atendidos con subsidios» a la energía, en tanto que «el 10 por ciento más pudiente dejará de ser subsidiado» con la implementación de la segmentación en el otorgamiento de los mismos, y aclaró que no se trata de una «imposición del Fondo Monetario Internacional» sino que está contenido en el programa económico del Gobierno.
«Los aumentos suponen la aplicación de la segmentación. El 10 por ciento más pudiente, que se ve beneficiado con subsidios, deja de ser subsidiado, lo cual es una medida muy progresiva en términos económicos. Hace que el que tiene pague», dijo Fernández esta tarde en una rueda de prensa en la embajada argentina en París.
En la última escala de su gira por Europa -el martes estuvo en España y el miércoles en Alemania-, el Presidente habló de la implementación de la segmentación de los subsidios, en una semana que estuvo marcada por las audiencias públicas encabezadas por la secretaría de Energía.
«Los sectores más débiles van a seguir siendo atendidos con subsidios», ratificó el Presidente al hablar con los periodistas argentinos que cubren la gira por Europa.
En cuanto a los aumentos, dijo que están «vinculados a los salarios, a cómo evolucionan» y aclaró que «nunca el aumento de tarifas puede ser mas alto que el aumento salarial de las personas, lo cual tiene un criterio distributivo muy grande, y es un porcentaje menor».
«Esto que estamos haciendo está en el programa económico. No es una imposición del Fondo. Creemos que es necesario hacerlo. Es muy difícil pensar que la economía pueda seguir subsidiando a los más ricos cuando vemos como se ha desatado un conflicto energético a partir de guerra y los precios de la energía se han disparado», explicó el Presidente.
«Estamos muy convencidos de que estamos en el camino correcto», concluyó Fernández sobre el tema tarifas.