La construcción aparece en el tope de todas las estadísticas como el sector que absorbió la peor parte del ajuste fiscal y la recesión que se profundizó en los últimos meses. Por un lado, es el más afectado en el paisaje recesivo general: se desplomó 19,7%, muy por encima del 5,1% de caída del PBI en el primer trimestre. También explicó casi el 60% de los puestos de trabajo perdidos desde el cambio de gobierno, de acuerdo a datos de la Secretaría de Empleo. La cámara asegura que ya hay cierres de empresas y convocatoria de acreedores entre firmas pequeñas, medianas y grandes.
La convención anual que se realizó en La Rural no logró estar ajeno a la difícil situación sectorial y estuvo atravesado por una lectura pesimista de la actualidad y con solo un puñado de elementos que invitan a los empresarios a esperar tiempos mejores. “Ya este año está perdido”, afirmaba un hombre de negocios histórico del sector.
“La situación de paralización mencionada tendrá un efecto inmediato en el estado y seguridad de uso de la infraestructura existente. Es un enorme dispendio de dinero no conservar lo existente. Recuperarlo será mucho más caro que lo que cuesta un mantenimiento en tiempo y forma”, cuestionó, antes de la llegada del ministro de Economía Luis Caputo y del secretario de Obras Públicas Luis Giovine.
Fuente: Infobae