Dichos cursos fueron dictados por personal del Centro de Instrucción y Adiestramiento en Técnicas y Tácticas Navales (CITT) y del Servicio de Salvamento de la Armada (SISA).
“Esta etapa cuenta con una parte teórica, una práctica y una evaluación escrita. También es una excelente oportunidad para evaluar las condiciones de liderazgo de cada uno de los Guardiamarinas en Comisión para hacerse cargo ante las distintas situaciones que se les plantea”, señaló la Jefe de 5° año de la Escuela Naval Militar, Teniente de Navío Ayelén Basualdo.
Durante la primera semana, los guardiamarinas realizaron el Curso de Lucha Contra Incendios, donde llevaron adelante, además de las clases teóricas, ejercicios en espacios confinados con los que cuentan los adiestradores del CITT, fomentando el trabajo en equipo y el cumplimiento de las normas de seguridad.
También participaron de un ejercicio de Control de Averías en el adiestrador perteneciente al CITT, en el que se cumplieron objetivos similares, pero ante situaciones en donde debieron controlar y mitigar una supuesta inundación a bordo. Previamente, los instructores de CITT dictaron clases teóricas a los futuros oficiales de la Armada Argentina.
Los Guardiamarinas en Comisión se instruyeron también en maniobras con botes y aproximación de embarcaciones con motor a cascos de unidades de superficie mayores. Además, adquirieron conocimientos básicos de buceo brindados por personal del Servicio de Salvamento de la Armada (SISA).
Por último, instructores del CITT dictaron el curso de Abandono y Supervivencia en el mar.
La experiencia en primera persona
El Guardiamarina en Comisión Patricio Esteban Rabioso, quien es de Lavallol y tiene 21 años, expresó: “Me sorprendió. Ya había hecho algunas prácticas a bordo, como Lucha Contra Incendios o Control de Averías, pero estos cursos están en otro nivel. Los simuladores estuvieron muy buenos y las explicaciones fueron muy completas; serán de mucha utilidad para el viaje en la fragata”.
Por su parte el Guardiamarina José Ignacio Rasjido Lacroux, de 24 años y oriundo de Salta, destacó la utilidad de las actividades: “Esta parte complementaria de nuestra instrucción es muy importante porque uno siempre debe estar preparado para actuar de manera segura ante un control de averías, incendio, supervivencia y todo lo que conlleva. Los simuladores fueron muy realistas y gracias a la ayuda de los suboficiales instructores pudimos superar los obstáculos que se nos presentaron”.
Mientras tanto, la Guardiamarina Evelin Belén Villavicencio, de San Miguel de Tucumán y de 22 años, comentó: “Es una experiencia única; me parece que es una oportunidad muy buena que me brinda la Armada Argentina. Aporta una importante experiencia a mi carrera profesional y a mi futuro como oficial”.
Gaceta Marinera