Homenaje al Almirante Brown en Puerto Belgrano

En la Plaza Juncal de la Base Naval Puerto Belgrano, se desarrolló la ceremonia por el 167º aniversario del fallecimiento del Almirante Guillermo Brown. Fue presidida por el Comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada, Contraalmirante Juan Carlos Coré.

Estuvieron presentes –entre otros invitados especiales– autoridades de las Fuerzas Armadas y de Seguridad de la zona, el intendente de Coronel Rosales, Rodrigo Aristimuño; Veteranos de la Guerra de Malvinas; personal militar y civil de la Armada, referentes de diferentes organizaciones locales e integrantes del Concejo Deliberante rosaleño.

El Himno Nacional Argentino, ejecutado por la Banda de Música de la Base Naval Puerto Belgrano, y la invocación religiosa a cargo del capellán castrense Presbítero Diego Kessler, dieron paso a las palabras alusivas a cargo del Jefe del Centro de Instrucción y Adiestramiento en Técnicas y Tácticas Navales (CITT), Capitán de Navío Néstor Darío Cersofios.

En la alocución, hizo referencia al máximo héroe naval como uno de los pilares fundamentales para lograr la Independencia de nuestro país. Además, realizó una semblanza en la que subrayó sus atributos de liderazgo, integridad, valor en combate y férrea actitud, que fuera ejemplo para sus tripulaciones y generadora del respeto de sus adversarios.

El Almirante Guillermo Brown enfrentó la vida seguro de sí mismo, “siendo ésta su actitud frente al combate. Sumamente exigente consigo mismo, trasladaba esta cualidad a quienes lo rodeaban, con los que tenía una conducta humana y altruista”, sostuvo el Jefe del CITT.

El Padre de la Armada Argentina tenía una necesidad clara de alejar las opresiones y una visión precisa de la libertad americana. “No había sentimientos mezquinos en sus acciones; entendió que en estos ideales de libertad sería la Patria la que se vería recompensada”, expresó.

Finalmente, aseguró que los hombres y mujeres de la Armada honran la memoria del Almirante Brown, “el hombre que supo navegar contra la corriente, trazó la estela que marcó el rumbo a seguir y acuñó la tradición naval que perdura en nuestra Institución”.

A continuación se colocaron ofrendas florales al pie del monumento del Padre de la Patria en el Mar, se efectuaron cuatro repiques de campana y se hizo un minuto de silencio. La Marcha de San Patricio y la Marcha de la Armada marcaron la finalización de la ceremonia.

Gaceta Marinera