Laureano Alimenti, de la Región Sanitaria I, explicó a La Brújula 24 cómo se realiza el trabajo de cobertura y admitió que están sumamente preocupados por los puestos que aún no se lograron cubrir en sectores críticos.
“El sistema de Residencias consta de instancias de formación, que es una especialización privilegiada dentro de un hospital. La Residencia consta de 3 o 4 años y en este 2023 el saldo fue de diferentes egresos”, indicó en “Nunca es tarde”, con la conducción de Emanuel Olaya.
Detalló que se completaron cupos en Anestesiología, Bioquímica, Cirugía General y Enfermería Pediátrica. En algunas especializaciones los cupos quedaron vacíos y en otras, las vacantes fueron ocupadas en forma parcial.
“En Fonoaudiología teníamos tres cupos, dos fueron ocupados y quedó un lugar libre. Nadie eligió Terapia Intensiva; lo mismo que Pediatría, Neonatología, Nefrología, Cardiología, Anatomía Patológica y Odontología. Tenemos tiempo hasta fin de año para poder cubrir esas vacantes”, precisó.
Alimenti dijo que los residentes perciben un haber similar al de los médicos que vienen haciendo carrera. “En Clínica Médica, Medicina Social, Trabajo Social y Diagnóstico por Imágenes, quedan algunas vacantes”, explicó.
Aclaró que se analizan acciones a tomar para hacer “más seductoras” las residencias de especialización que quedan por completar. De 30 especialidades, 22 terminaron siendo elegidas. De un total de 71 cupos, 46 se cubrieron y quedaron 25 vacantes.
Fuente: La Brújula