Mondelez, la compañía alimenticia multinacional que comercializa desde las galletitas Cerealitas hasta Mantecol, solicitó la apertura de un procedimiento preventivo de crisis (PPC) para mediar con el sindicato ante la Secretaría de Trabajo.
La empresa detalló las razones detrás de la decisión: «La coyuntura económica que atraviesa el país afecta de manera directa a la industria de la alimentación de la que somos parte. En el último periodo se vienen registrando una caída en el consumo y una desaceleración en nuestras ventas, con la consecuente acumulación de stock de productos y reducción de la producción», dice un comunicado oficial.
Si bien la noticia se dio a conocer ayer por una primicia de BAE Negocios, ya hubo una primera reunión en el Ministerio de Producción y Trabajo el 14 de noviembre pasado y habrá una audiencia más el 22 de este mes.
Mondelez tiene plantas en Pacheco y Victoria (provincia de Buenos Aires) y Villa Mercedes (San Luis). La negociación de la compañía ante la Secretaría de Trabajo es con el Sindicato de Alimentación.
El texto que envió la empresa también aclara que las audiencias tienen como fin evaluar «medidas temporales» (tales como suspensiones) en las plantas «para evitar medidas más extremas». Voceros de la firma aseguraron que aún no hay un número oficial de cuántos trabajadores resultarían afectados por el PPC.
En la Argentina, la compañía tiene un portfolio de 25 marcas entre las que se encuentran Tita, Palitos de la Selva, los jugos Clight, los chocolates Cadbury y Toblerone, las galletas Oreo y Pepitos y los chicles Bazooka.
Mondelez no es la única empresa alimenticia en problemas. A inicios de este mes, Arcor informó pérdidas por $2610 millones en los primeros nueve meses del año y, el mes pasado, notificó a 2500 empleados para que se tomen vacaciones.
No son años fáciles para el consumo masivo. En 2019, las consultoras privadas proyectan una caída en el orden del 10%. El sector ya viene de tres años a la baja.
Qué es un procedimiento preventivo de crisis
Un procedimiento preventivo de crisis (PPC) permite negociar entre una empresa y sus trabajadores para continuar con la actividad sin que haya despidos masivos y cierres. Implica que ambas partes se reúnan en la Secretaría de Trabajo y formulen propuestas para seguir adelante.
Previamente, y para que la Secretaría de Trabajo acepte un PPC, las compañías deben presentar balances y otros documentos que den cuenta de la crisis de la firma y así justificar la solicitud.
Según explicó previamente a LA NACION Javier Alegría, socio del Estudio Alegría, Buey Fernández, Fissore & Montemerlo, la figura «permite despedir o suspender personal con menor costo para el empleador». «Pero debe ser homologado por la Secretaría de Trabajo. Esto se da cuando hay menos actividad, pero no quiere decir que las empresas que lo solicitan estén insolventes», detalló.
Fuente: La Nación