La vacuna fue desarrollada por la Universidad Nacional de San Martín, el Conicet y el Laboratorio Cassará, e impulsada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología. Según informó el Gobierno, la vacuna “demostró ser segura y eficaz como refuerzo contra el virus SARS-CoV-2 en mayores de 18 años. Actualmente, ya se produce en la planta de Cassará en la Ciudad de Buenos Aires y puede adaptarse a nuevas variantes de SARS-CoV-2 circulantes en la región”.
Fuentes del laboratorio Cassará dijeron que ahora vendrá la etapa de aprobación del primer lote producido, trámite que finalizaría a fines de noviembre. Y explicaron que ya tienen fabricado principio activo para hacer un millón de dosis. La idea que tienen es que se utilice en la Argentina y también exportarla a la región.
Se trata de la primera vacuna desarrollada completamente en Argentina, tanto el principio activo como el formulado y el envasado. Durante la pandemia, mediante transferencia de tecnología la vacuna de Astrazeneca se fabricó en el país y el envasado se realizó en México.
Pensada para dosis de refuerzo en personas ya inmunizadas, la vacuna “Arvac-Cecilia Grierson” se basa en la tecnología de proteínas recombinantes, una tecnología segura que ya se aplica en las vacunas contra la Hepatitis B en niños recién nacidos desde hace más de 20 años o más recientemente, el VPH.
Fuente: Clarín