El presidente Alberto Fernández afirmó este lunes que la cuarentena no finalizará el domingo 12 de abril sino que «será flexibilizada» para distintos sectores económicos. Además, adelantó que el próximo lunes no se reanudarán las clases y apuntó contra un sector de la oposición al que acusó de «tirar piedras» en medio de la crisis por el coronavirus.
En una entrevista con Desde el llano, el jefe de Estado aseguró: «La cuarentena va a seguir, pero podemos flexibilizarla. Hicimos un enorme esfuerzo y no lo podemos perder». En ese sentido, consideró: «Podemos pensar en levantarla para algunos sectores. Lo vamos a resolver en conjunto, quiero que todos escuchemos a los especialistas».
El mandatario admitió que el aislamiento implicará «un costo grande para la economía», pero que la prioridad del Poder Ejecutivo «es cuidar a los argentinos». «Hemos dado un gran paso, miren lo que pasa en otros países», dijo.
El Gobierno espera que el pico de contagios del coronavirus llegue a mediados de mayo, pero que la aplicación de la cuarentena dará «tiempo» al país para prepararse para ese momento. «Cuanto más demoremos la cuarentena, más tiempo vamos a ganar para fortalecernos en insumos y de atender el pico de la epidemia», apuntó.
Fernández afirmó, sobre el impacto en muchas pymes que vieron decaer su nivel de actividad por el aislamiento social, que «la preservación de la empresa y del trabajo es central». «La vida seguirá y quiero que en ese momento nadie tenga temor de perder su negocio o su trabajo», señaló.
Por otra parte, el jefe de Estado habló sobre la eventual aplicación de un tributo nuevo a las grandes fortunas. «No es posible pedir que nadie pague y que el Estado haga todo. Alguien va a tener que hacer un esfuerzo mayor, pero eso depende del Congreso, yo no puedo poner impuestos nuevos», aseveró.
De todas formas, se mostró a favor de un gravamen especial de ese tipo. «Un impuesto a las grandes fortunas, no a los que blanquearon, tiene lógica. La canciller alemana Ángela Merkel, cuando estuve en Europa, me preguntó «¿por qué los ricos no pagan más impuestos?»».
El cobro de jubilaciones y críticas a la oposición
El Presidente se refirió a la falla organizativa del viernes de la semana pasada para el cobro de jubilaciones, que provocó aglomeraciones en los bancos. «Hubo un error nuestro. También es cierto que mucha gente vio los bancos abiertos y se volcó a hacer trámites que no tenían que ver con el pago de haberes».
«Hay jubilados que confían más en verle la cara al empleado del banco que ir al cajero automático. Fue un trago amargo pero reaccionamos en 24 horas, con la ayuda de los intendentes. Fue un error y no tiene que volver a pasarnos», admitió.
Por otra parte, Alberto Fernández hizo una dura crítica a un sector opositor al que acusó de «tirar piedras».
«Hay una oposición que llena las redes sociales con difamaciones, noticias falsas, insultos y tratan de levantar a la agente en un momento que deberíamos estar unidos. Todo el mundo sabe quién es el jefe de los trolls. Pero hay otra oposición que está trabajando codo a codo», sostuvo.
En esa línea, se refirió a los cacerolazos que se escucharon en las últimas semanas, para pedir que los funcionarios se bajen los salarios. «Hay gente que honestamente no le gusta algo y se queja y está bien, eso es la democracia. Pero estoy seguro que la enorme mayoría de los argentinos me acompaña a mí y a esta lógica de cómo afrontar la pandemia», concluyó.
Respecto a la repatriación de argentinos varados en distintos países del mundo, dijo que el Estado realiza «un enorme esfuerzo» para regresar a los ciudadanos desde otros países.
«Mucha gente piensa que es solo un tema que tiene que resolver la Argentina, pero hay países que no dejan bajar ni un avión. Estamos atendiendo cada uno de los casos. Nadie se olvidó de ellos», subrayó.
La polémica por la compra de alimentos
Alberto Fernández, además, fue consultado en Desde el llano sobre la polémica por la compra de alimentos por parte del Ministerio de Desarrollo Social, que pagó precios por encima de los «máximos» que puso de referencia el propio Gobierno para los comercios.
«Creo en la honestidad de Daniel Arroyo, que me dijo que va a abrir una investigación para ver qué es lo que pasó. Me planteó que las empresas se plantaron y no quisieron bajar los precios. Esto habla de la cartelización de algunos sectores que no son capaces de flexibilizar sus posiciones», explicó y disparó, para despegar a su ministro de las acusaciones: «El primero que va a perseguir a un corrupto es el Presidente».
Además, adelantó que se publicará un decreto para evitar que vuelva a ocurrir una situación similar en futuras compras oficiales. «La compra de alimentos que se ha hecho no se pagó todavía. Di la orden a Jefatura de Gabinete, que tiene autoridad en este tema, que ninguna compra se pueda hacer sin respetar los precios máximos que el Estado nacional fija», anticipó.
«Los procesos deberán ser revisados y se aplicarán los precios máximos. No puede ser que se le planten al Estado y le digan «no te vendo». ¿Con qué autoridad moral si no voy a ir a decirle a los comerciantes que respeten los precios máximos?», se preguntó.
«Soy el primer dialoguista, pero si me obligan a usar el poder, lo voy a usar. No voy a permitir que se pague lo que no hay que pagar y que algunos se llenen los bolsillos», cerró.
Fuente: TN