Las estafas las cometían a través de fotografiar las tarjetas de débito que Nastasi padre manejaba en el comercio donde trabaja, a partir de ahí LA BANDA armaba las operaciones para sacar dinero de las
cuentas.
El trabajo impecable de investigación de la DDI local logró desenmarañar la compleja trama de los estafadores; valiéndose de la confianza que Nastasi padre contaba en el comercio donde trabajaba era que
sacaba foto a las tarjetas, especialmente de personas mayores, y a partir de ese momento se consumaban las sustracciones.
En los celulares de los imputados se encontraron varias fotos de los plásticos de las personas estafadas.
Se estima en más de 600 mil pesos el «producido» por los delitos.
Habían cómplices que «compraban» en 2.900 pesos los datos malversados e hicieron compras.