Esta medida permite que los productores vendan directamente animales vivos al exterior, sin necesidad de procesarlos en frigoríficos locales, lo que ha generado preocupación en la industria frigorífica y en toda la cadena comercial de la carne.
Según reportan medios especializados, productores ganaderos señalan que esta decisión podría beneficiar especialmente al fideicomiso ganadero Invernea, propiedad de José Pazo, actual director de la ex AFIP, y en la que también participarían el ministro Caputo y Santiago Bausili, presidente del Banco Central. Invernea, que administra más de 40 mil millones de pesos en activos ganaderos y cerealeros, podría aprovechar la nueva normativa para exportar directamente su ganado en pie, evitando el procesamiento local.
La industria frigorífica y otros actores de la cadena comercial han expresado su alarma ante esta medida, argumentando que podría afectar la producción local y elevar los precios de la carne en el mercado interno. Además, consideran que la exportación de animales vivos representa una pérdida de valor agregado y empleo en el país.
Por otro lado, desde el gobierno se argumenta que la medida busca promover una mayor inserción de Argentina en el comercio mundial y se fundamenta en el libre comercio y las decisiones autónomas del sector ganadero.
En resumen, la reciente autorización para exportar ganado en pie ha generado divisiones en el sector agropecuario argentino, con debates sobre sus posibles beneficios económicos y las implicaciones para la industria local y el mercado interno.
Fuente: InfoGEI