La Sala III del tribunal rechazó por mayoría el recurso de la fiscalía contra la medida que, a pedido del propio imputado, D.B., dispuso la justicia federal de Bahía Blanca, que, por el “eventual daño”, le impuso la donación de 20 litros de leche por mes, durante cuatro meses consecutivos, al merendero del Club Estudiantes Ferroviario Mitre.
A D.B. se le aplicó el artículo 205 del Código Penal porque el 21 y el 22 de marzo de 2020, a poco de dictado el Decreto del Poder Ejecutivo Nacional (PEN) 297/20 que tuvo por objeto impedir la propagación de la Covid-19, habría violado el aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO) al circular con un automóvil por la vía pública en la localidad bonaerense de Coronel Suárez, siendo detenido en ambas ocasiones.
En primera instancia se le concedió la posibilidad de reparar el “eventual daño” porque se consideró que “los hechos endilgados acaecieron sin violencia” y “sin que se haya verificado un contagio a raíz de su circulación por la vía pública”, decisión que fue apelada por la fiscalía interviniente.
Para los camaristas Eduardo Riggi y Mariano Borinsky la resolución impugnada, que entendió “útil y proporcionado el ofrecimiento realizado” por la defensa del imputado, “se encuentra razonablemente sustentada y cuenta con los fundamentos jurídicos necesarios y suficientes”.
La defensa había argumentado que “por motivos de convivencia”, D.B. se trasladaba al principio de la cuarentena entre los domicilios de sus progenitores.
“Teniendo en cuenta la índole, naturaleza y características de la conducta endilgada al encausado, que no representó por cierto ni siquiera un daño mínimamente potencial y a poco de publicarse en el Boletín Oficial el decreto 297/2020, lo resuelto deviene acertado y resulta una razonable aplicación de la ley al caso concreto”, señalaron.
En disidencia, el camarista Juan Carlos Gemignani consideró que el recurso fiscal debía ser admitido y fijarse audiencia para comenzar su trámite procesal.
Fuente: Télam