Los compañeros municipales del cementerio siguen con medidas de fuerza

Desde el Sindicato de Trabajadores Municipales de Coronel Rosales informan a la comunidad que los trabajadores municipales correspondiente al área de servicios del cementerio local continúan con las medidas de fuerza iniciadas esta semana, por tal motivo la necrópolis se encuentra cerrada al público, a su vez se informó que están garantizados los servicios de sepelios que ocurran en el transcurso de la medida.

Aquí el comunicado:
«Desde el Sindicato de Trabajadores Municipales de Coronel Rosales ponemos en conocimiento de los vecinos que la medida de fuerza consistente en retención de tareas y que afecta al cementerio local, sigue llevándose adelante al no haberse llegado a un acuerdo con el Departamento Ejecutivo, por lo que la necrópolis local estará cerrada para el público en general y se abrirá únicamente para realizar los sepelios como corresponde.

Cabe destacar que los funcionarios políticos estaban al tanto de lo resuelto por los trabajadores, quienes ya habían manifestado que de tener que llevarse adelante una inhumación, esta debía ser realizada por los funcionarios ya que los trabajadores mantenían la retención de tareas.

En otro orden y atento a las declaraciones del Intendente en relación a la combativa postura adoptada por este Sindicado, decimos que lo combativo va de la mano de la falta de respuestas, porque lo que hoy se niegan a poner en vigencia, forma parte del Convenio Colectivo que el mismo Ejecutivo firmó en su oportunidad, entre bombos y platillos en el Teatro Colón de nuestra ciudad, tiempos que parecen haber quedado lejos, para ellos al menos. Reclamamos el cumplimiento de lo firmado hace ya cinco años y por el respeto de los derechos consagrados para todos los trabajadores.

Cinco años pasaron, tiempo suficiente de espera, reuniones, idas y venidas. Muchos trabajadores municipales no atraviesan su mejor momento, la crisis por la pandemia se hace sentir y sostenemos lo justo del reclamo. Tal vez las medidas de fuerza sean molestas y hasta a veces deriven en hechos tristes, pero cuando no hay respuestas, cuando se insiste en borrar con el codo lo que se firma con la mano, no queda más remedio que accionar. Rogamos a nuestros vecinos rosaleños sepan disculpar las molestias. El Sindicato combativo se termina cuando se reconozcan y se respeten los derechos de los trabajadores.»