Los datos fueron parte del análisis que realizaron ayer directivos de la Asociación de Concesionarias de Automotores (Acara), en una reunión de prensa. El presidente de Acara, Ricardo Salomé; el secretario general, Rubén Beato, y el gerente general, Carlos Movio, estimaron para 2020 un piso de ventas similar a las 460.000 unidades con que terminará 2019.
«Estamos finalizando un año tremendamente complejo, con márgenes de rentabilidad nulos y en algunos casos hasta negativos. Una realidad que venimos viendo en los últimos treinta meses de forma acelerada», reseñó Salomé al definir que «el mercado se cayó a pedazos al bajar de 800.000 unidades en 2015 a unas 460.000 para este año».
El directivo expresó que «será la historia la que juzgue a la administración que mañana finaliza, pero ahora hay esperanza con este nuevo gobierno, ya que es el mismo que generó las condiciones para acariciar el millón de autos en 2013, cuando se alcanzaron los 950.000 patentamientos».
Sobre el alza de precios, Movio estimó que, si se consideran las bonificaciones y descuentos a los que debieron apelar las concesionarias para contrarrestar la caída de ventas, el aumento real se recorta al 63% en el año.
Fuente: La Nación