La Santa Misa fue oficiada por el Capellán Castrense, presbítero Pablo Caballero Karanik; y concelebrada por los capellanes castrenses Diego Kessler y Luis Scrinzi. Asistieron feligreses y autoridades navales quienes, en presencia del pabellón nacional, participaron del oficio religioso.
En su homilía, el presbítero Caballero Karanik destacó: “Quienes han partido de este mundo con la fe en el Señor han dejado la vida temporal para entrar en otra aldea: la aldea de la vida eterna. Lo mejor que hacemos por ellos es orar, sobre todo ofrecer el santo sacrificio de la Misa”.
“En este día la palabra de Dios nos dice cómo debemos valorar la muerte desde la vida; cómo debemos pensar el futuro desde el presente. Nuestra vida tiene un sentido cuanto más amamos, cuanto más obramos en caridad y cuanto más nos perdonamos”, reflexionó.
Gaceta Marinera