En varios municipios debieron suspenderse las clases, mientras que el Ejecutivo de Axel Kicillof aseguró que no tomará la decisión de manera masiva y generalizada, a pesar de la denuncia de los docentes respecto de la falta de ventiladores o, incluso, agua en muchos establecimientos educativos.
Ayer se conoció un documento oficial de la Dirección General de Cultura y Educación bonaerense que muestra la inversión que hizo la Provincia en la compra de 3.740 aparatos de ventilación, cuyo valor fue de $149.600.000.
Sin embargo, el reparto de las unidades muestra una prevalencia del conurbano bonaerense: La Matanza recibió 400; Lomas de Zamora 230; Pilar 170; José C. Paz, 150 y La Plata, Ensenada, Quilmes y Esteban Echeverría, 120.
En cambio, distritos como Bahía Blanca, Dorrego, Coronel Pringles, Coronel Rosales, Coronel Suarez, Carmen de Patagones, Tres Arroyos no recibieron nada. Monte Hermoso (20) y Tornquist (20), fueron la excepción.
La oposición, ninguneada
Desde municipios opositores, intendentes y concejales expresaron su descontento por lo desigual del reparto. Soledad Martínez, edil de Bahía Blanca, denunció que la ciudad «fue discriminada por Provincia». Ante ello, desde su bloque (Juntos) presentaron un proyecto solicitando explicaciones a Kicillof sobre por qué las escuelas del distrito no fueron incluidas en la nómina y cuál fue el criterio para la selección.
En la misma sintonía, el mandamás de Lanús, Néstor Grindetti, hizo público su malestar luego de tener que comprar ventiladores para las aulas de los establecimientos dependientes de la Provincia.
En esa línea, el alcalde PRO volvió a poner sobre la mesa la discusión por la autonomía municipal. «¿No es más fácil que la responsabilidad y los recursos sean directamente del Municipio?», lanzó.
Fuente: La Tecla